El 12 de julio de 1962 ofrecían su primer concierto como The Rollin´ Stones, por lo que el jueves pasado se cumplieron 50 años de aquel recital en el Marquee londinense que sigue envuelto en la leyenda, mientras languidecen los rumores de una nueva gira de la banda liderada por Mick Jagger y Keith Richards.

Todo empezó cuando Jagger y Richards, antiguos compañeros y amigos del colegio, se encontraron por casualidad en el andén 3 de la estación de tren de Dartford, a unos 25 kilómetros de Londres. Los discos de Chuck Berry y Muddy Waters que llevaba Jagger revelaron un gusto compartido por la música que les ha llevado al éxito durante este medio siglo: el blues, el soul y el rhythm and blues.

Little Boy Blue and the Blue Boys, la banda que formaron con Dick Taylor, más tarde fundador de The Pretty Things, fue el germen de los futuros Stones. Jagger y Richards conocieron a Brian Jones cuando tocaba la guitarra con la banda de Alexis Korner, en la que también militaban Ian Stewart y Charlie Watts.

La música de Chuck Berry y Bo Diddley era el referente de una formación que en junio de 1962 incluía a Jagger, Jones, Richards, Stewart, Taylor y al batería Tony Chapman. Jones fue también el responsable del nombre del grupo. Según la versión de Keith Richards, Jones llamó a la revista "Jazz News" para anunciar el concierto, y cuando le preguntaron por el nombre del grupo vio en el suelo un LP de MuddyWaters que contenía la canción "Rollin´ Stone".

Los Rollin´ Stones (luego Rolling Stones, sin el apóstrofe) estrenaron la denominación con Jagger, Richards y Jones, con Ian Stewart al piano, Tony Chapman a la batería y Dick Taylor al bajo, según la mayoría de las versiones, aunque en aquella época el ir y venir de músicos entre los grupos era habitual.

A Brian Jones le hubiera gustado ser el líder, pero el grupo era más como una comuna. Pronto Dick Taylor, algo frustrado por tener que pasarse al bajo -era guitarrista-, dejó los Stones para estudiar en una escuela de arte. Le reemplazaría poco después Bill Wyman, que junto con el batería Charlie Watts completaría la formación más mítica de los Stones en los 60: Mick Jagger (voz), Keith Richards (guitarra), Brian Jones (guitarra), Bill Wyman (bajo) y Charlie Watts (batería).

Comenzaba así la historia de la banda de rock más grande del mundo, un título que se comenzaron a atribuir ellos mismos en 1969 y que se hizo realidad. A los 200 millones de discos vendidos se añade el mérito de conservar una alta consideración de la crítica durante este medio siglo.

El número uno en Estados Unidos con "(I can´t get no) Satisfaction" (1965) les aupó a un éxito mundial oscurecido por episodios trágicos como la muerte de Brian Jones al poco de ser despedido del grupo y el homicidio del festival de Altamont, también en 1969.

La primera actuación de los Stones en España, el 11 de junio de 1976 en la Plaza de Toros Monumental de Barcelona, estuvo también marcada por la tragedia: cinco días antes, Keith Richards había perdido a su hija de 10 semanas, Tara, por muerte súbita. Más memorable fue su concierto del 7 de agosto de 1982 en el estadio Vicente Calderón de Madrid, con una impresionante tormenta eléctrica que acompañó la salida del grupo a los acordes de "Under my thumb".

Pese a que Mick Jagger y Keith Richards se hayan reconciliado tras la ácida autobiografía del segundo ("Life") y que Ron Wood lo haya sugerido, no hay gira a la vista. La conmemoración se hará a través de un libro, "The Rolling Stones: 50", ya a la venta y una película documental que se estrenará en septiembre.