Se habría pasado horas hablando de Carlos Barral, el hombre que en el año 1963 la incorporó a la editorial cual "ninfa eficiente, secretaria general, y consultora en Seix Barral", en palabras de Caballero Bonald, pero ayer tocaba emocionarse porque Rosa Regàs recibía el premio Biblioteca Breve 2013 después de haber sido durante varios años miembro de la misma editorial y jurado del certamen literario que ayer le era concedido, y que está dotado con 30.000 euros.

La novela Serás amor, bajo el pseudónimo de Julia Robinson -un homenaje a las mujeres científicas, tan poco reconocidas-, escondía el último trabajo de la autora catalana, titulado Música de cámara. Según la directora de Seix Barral, Elena Ramírez, el jurado destacaba, por unanimidad, una "poderosa historia de amor que denota excelente oficio en la elaboración del personaje femenino protagonista y en las diversas voces que lo acompañan; una extraordinaria recreación de la posguerra y el mundo de los represaliados que cuestiona, de forma sobrecogedora, a la sociedad burguesa de la época y las ambigüedades de la Transición".

"Me hubiera gustado que esta alegría se hubiera producido en un momento menos trágico, brutal y obsceno de la vida política de este país", dijo Regàs.

En Música de cámara, una historia de amor truncado entre una exiliada republicana y un miembro de la alta burguesía catalana, sirve de partitura para componer una sinfonía de la memoria, aunque por la estructura de la novela, la Transición es objeto de una gran elipsis, nada fruto de la casualidad.