Talentos emergentes en la moda hay entre el alumnado del Centro Barreira Arte+Diseño, y así se pudo comprobar en un lugar privilegiado: a Terraza/lounge del Ateneo Mercantil, que ha inaugurado su magnífica instalación en lo más alto del histórico edificio.

La primera parte del desfile „que contemplé junto a la actual y afable presidenta del Ateneo Carmen de Rosa, madrina del acto„ se dedicó a las colecciones que integran el proyecto fin de carrera de los alumnos del último curso, con enfoques variados y un notable nivel de conjunto. Minuciosos y convincentes son los vestidos inspirados en las lámparas y papiroflexia primorosamente realizados por Begoña Abad. Estela Gil mima la vertiente couture a base de sedosos modelos abiesados de buen corte y suave caída. Reminiscencias andaluzas y toreras cuajan en el esmerado trabajo de Jessica San Pablo. La fiesta, a base de vestidos o shorts mini en lurex y bustos transparentes la firma Graicy Ramírez. Bikinis irisados y vaporosas camisolas componene el equipo de baño, bien conseguido por Jahnava Escalona. Y con impecable factura lucieron los vetidos y faldas de línea campana, correctamente estructurados alternando lino, satin, denim y pétalos de organza, por Merel Rutten.

En la segunda parte irrrumpió la entusiasta inventiva de los alumnos principiantes, que desplegaron una cabalgata de novias anticonvencionales bajo la enseña «África». Modernas Nefertitis, reinas de Saba redivivas, heroínas de desiertos novelescos, siluetas evocadoras de los harenes cinematográficos en tecnicolor a lo María Montez o Ivonne de Carlo, pusieron en marcha un cortejo de jugosa imaginación. Y me pareció sumamente interesante la aportación de los estudiantes de la especialidad de Sombrerería „sólo impartida en Barreira„ en la que sus autores Amanda Mut, Paula Badía, Victoria Reyna y Pablo Díaz-Güemes denotaron maestría en una buena selección de tocados y guirnaldas, con especial mención a los turbantes entretejidos con materiales diversos, o adornados por fogosas plumas. Un llenazo de público eminentente joven aplaudió a rabiar el vistoso desfile, prueba evidente de la sólida formación recibida, así como del interés que la moda despierta en las nuevas generaciones. De las que saldrán los astros del futuro.

Con muchos años de historia y un justo prestigio mundial, Bulgari alcanza el clasicismo, no porque no renueve constantemente sus piezas de alta joyería, sino porque la delicada perfección de su estilo le confiere ya la categoría de indiscutible. Su nuevo emplazamiento en una extensa superficie de El Corte Inglés de Pintor Sorolla (una tienda dentro de otra) permite a la marca italiana llegar directamente al público más heterogéneo y abundante. Elegantes vitrinas y mostradores exhiben toda la producción de Bulgari, tanto las preciosas joyas como los cotizados bolsos, carteras y marroquinería de sello inconfundible, y los célebres relojes. José Luis Avilés, director de la firma en Valencia, hizo los honores a numerosos invitados, entre los que saludé a Amparo Ortuño, Encarna Roig de Acosta, y MªDolores Enguix de Óptica Climent.