"O me hablas en español, o no pasas". Con estas palabras se topó Laura G., una joven de Castelló que acudía al Arenal Sound en la tarde del viernes con la idea de disfrutar de los conciertos del fin de semana, deseo que no se vio cumplido finalmente porque la amenaza del miembro de seguridad que protegía la entrada del recinto se cumplió al no cambiarse la joven del valenciano al castellano.

Los hechos ocurrieron alrededor de las 2 de la madrugada, cuando Laura, acompañada de una amiga, quiso volver a entrar al recinto tras haber asistido al concierto del grupo Manel. Previamente, sobre las 20 horas, las dos jóvenes mantuvieron el primer contacto con la miembro del cuerpo de seguridad que posteriormente protagonizaría el incidente. Las asistentes preguntaron si dentro se podía cenar, a lo que la mujer contestó: "Habládme en castellano, yo no entiendo esas lenguas que habláis". A su lado, un compañero respondió que él sí las entendía, y que dentro podrían comprar bocadillos. Pasaron sin problemas, vieron el concierto y salieron del recinto. Al volver se encontraron con la misma trabajadora. "Estas son las que antes me hablaban en catalán", dijo, según el relato de Laura G. "Ahora os voy a registrar los bolsos". Al hacerlo, encontró un espray "antivioladores", que arrojó al suelo. "Esto no se puede entrar", sentenció. La joven repuso, siempre en valenciano, que no hacía falta que lo tirara al suelo. "¿No ves que no te entiendo, que soy de Jaén?", contestó la guarda de seguridad. "Estas me están cabreando", añadió.

Por su parte, desde la organización del festival negaron ayer a este diario que tal amenaza se produjera. "Le pidieron que se explicara en castellano porque no la estaban entendiendo, pero no le dijeron que no podía pasar", informaron los responsables de seguridad.