La consellera de Educación, Cultura y Deporte, María José Català, ha manifestado que la posibilidad de tener que sustituir al tenor protagonista de 'La Traviata', Ivan Magrì, aquejado de dolencias cervicales, estaba "controlada". "Si no, es complicado traer a un tenor en cuestión de minutos y ponerlo en el escenario", ha dicho.

Así lo ha señalado tras la presentación del Festival 10 Sentidos, preguntada por el hecho de que Les Arts no tuviera sustituto para Magrì, que tuvo que retirarse durante el estreno de la temporada y fue sustituido por el tenor Nikolai Schukoff, que ensaya en Valencia el papel de Siegmund en 'Die Walküre' que programará el coliseo en noviembre y, en escena, por el coreógrafo de la función y asistente de la dirección de escena, Christian David Krumm.

Al respecto, la titular de Cultura mantiene que "es una circunstancia incontrolable el hecho de que una persona tenga una indisposición por un tema de salud".

"PENSÁBAMOS QUE IBA A PODER ACTUAR TODA LA ÓPERA"

"La verdad es que pensábamos que iba a poder actuar durante toda la ópera", ha admitido Català, quien explica que "finalmente después de la primera parte, en el descanso, la recomendación médica aconsejó que no continuara".

Català ha destacado que, "no obstante, el tenor que estaba ensayando para la ópera wagneriana se presentó prácticamente en unos minutos" y que, "por lo tanto, no es una circunstancia que no estuviera controlada porque si no, es complicado traer a un tenor en cuestión de minutos y ponerlo en el escenario".

La indisposición del tenor que encarnaba a Alfredo Germont obligó a interrumpir durante cerca de 20 minutos la función que abría la octava temporada del coliseo valenciano y se solventó después de que Nikolai Schukoff, que se encontraba en uno de los palcos, se ofreciera "amablemente" a reemplazarle --desde un atril en el extremo del escenario-- al haber interpretado "numerosas veces" ese rol.

Esa fue la explicación facilitada desde la megafonía al público de la Sala Principal, al que se informó al inicio de que el protagonista sufría problemas cervicales. Entre los asistentes estaban, entre otros, el presidente de la Generalitat, Alberto Fabra, acompañado de la consellera de Cultura y los responsables autonómicos de Sanidad, Manuel Llombart, y de Gobernación y Justicia, Serafín Castellano, así como el vicepresidente primero de la Mesa de las Corts, Alejandro Font de Mora, y la intendente de Les Arts, Helga Schmidt.