La investigación judicial sobre los cuadros del Museo de Bellas Artes San Pío V de Valencia que acabaron, sin permiso de la pinacoteca, en una iglesia de la ciudad deja en una situación delicada a su directora, Paz Olmos, después de que la titular del juzgado de instrucción número 16 de Valencia haya decidido citarla a declarar en calidad de imputada. La exdirectora general de Patrimonio de la Generalitat se enfrenta a un presunto delito contra el patrimonio. No obstante, la Conselleria de Educación y Cultura decidió ayer mantener en su puesto a Olmos: «No tiene sentido su cese teniendo en cuenta que no existe ninguna irregularidad administrativa, ni económica ni lucro», señalaron fuentes del departamento.

En opinión de la Federación de Servicios Públicos de UGT, el mantenimiento de Olmos choca con la ley valenciana de Ordenación y Gestión de la Función Pública e incluso con el Estatuto Básico del Empleado Público.

El sindicato, que fue el que denunció el caso ante la Fiscalía en mayo pasado, considera que la decisión de la juez da indicios, haya o no delito penal, de la existencia de una «irregularidad administrativa». Por ello, ayer mismo solicitó por escrito a la consellera María José Català que abra expediente disciplinario a Olmos y decrete la suspensión provisional de sus funciones, dadas las características del presunto delito. «¿Cómo puede un imputado de un delito contra el patrimonio permanecer en la dirección de un museo?», se preguntaba ayer el secretario de Administración Autonómica de FSP-UGT, Gonzalo Fernández.

Como publicó en exclusiva Levante-EMV el pasado 17 de julio, el caso es objeto de investigación judicial después de que la magistrada incoara diligencias previas tras recibir de la Fiscalía la denuncia. La organización sindical puso en conocimiento del estamento judicial que una veintena de cuadros del museo que habían sido depositados en el monasterio de Santa María del Puig habían acabado en la iglesia en Valencia de la orden de los mercedarios sin que la pinacoteca hubiera dado su permiso. La denuncia sustenta la acusación contra la dirección del museo en una serie de informes de técnicos del propio centro uno de ellos fechado en octubre de 2010 en los que se alerta de la situación y del deficiente estado de conservación de algunas pinturas. Alguna de ellas, añadía el especialista en otro documento más reciente, ha sido incluso restaurada sin conocimiento ni tutela del museo.

Tras saltar a la luz pública el caso y la investigación judicial, la dirección lo planteó rápidamente ahora ante el patronato de la pinacoteca, que reúne a representantes del Ministerio de Educación y Cultura, la conselleria y la Real Academia de San Carlos, entre otros (el museo es de titularidad estatal y gestión autonómica).

Paz Olmos ha defendido en todo momento que fue ella quien inició la revisión de los depósitos del San Pío V. Por eso, se declaraba «confiada» en que la vía judicial no prosperaría. Por ahora, marcha.