El estreno del frío otoñal no detuvo a las decenas de personas del mundo de la cultura que acudieron en la tarde de ayer al estreno de Mostra Viva en el claustro del Centre Cultural La Nau de la Universitat de València. El certamen, que se extenderá hasta el próximo domingo, nace de las cenizas de la desaparecida Mostra de Cinema del Mediterrani, cuyo espíritu abierto, colorista y alegre de sus primeros años reivindica.
El primer protagonista de esta experiencia alternativa y sin respaldo de las administraciones valencianas fue Pablo Llorens, el cineasta de animación valenciano ganador de dos Goyas. Durante el acto de anoche se proyectaron algunos de sus cortos. La ceremonia contó asimismo con la participación de la actriz valenciana Rosanna Pastor.
Mostra Viva se desarrolla en cuatro escenarios oficiales (La Nau, la sede de la SGAE en Valencia, el Octubre Centre y el Jardí Botànic) más otras sedes esporádicas repartidas por Russafa, el Carme y Benimaclet.
Se proyectarán un total de 60 filmes agrupados en seis secciones, incluyendo dos estrenos: el largometraje de ficción Pedazos de mí, de la valenciana Susi Gozalvo (Zhao), y Una dona sense ombra, de Javier Espasa, el director del Centre Buñuel de Calanda, que evoca la vida de Asunción Balaguer, la actriz viuda de Paco Rabal.
Carles Mira, Costa-Gavras, David Trueba y Goran Paskaljevic serán otros de los homenajeados, así como el actor y cantautor valenciano Ovidi Montllor, que será el protagonista de la clausura.
Mesas redondas sobre cine, música y poesía del Mediterráneo, y arte son algunas de las disciplinas también contempladas.
