Tiempo de abundancia de títulos en el Palau de les Arts, que en los próximos días verá como alternan La traviata „hoy toca representación„ y La valquiria, que se presenta mañana. El coliseo muestra de esta manera su homenaje a Giuseppe Verdi y Richard Wagner, los dos compositores de cuyo nacimiento se conmemoran los 200 años. Tiempo también de pluriempleo para Zubin Mehta y la Orquestra de la Comunitat Valenciana (OCV), que en 24 horas han de cambiar de registro. La razón de este fenómeno es que se ha abierto hueco en el calendario de la temporada al musical Los miserables, que el día 22 aterriza en el teatro de ópera para quedarse un mes.
La valquiria supone el homenaje valenciano a Wagner y un objetivo perseguido desde hace tiempo por la intendente de Les Arts, Helga Schmidt, y Mehta: reponer, al menos en parte, la producción de referencia de la joven ópera de Valencia, El anillo del Nibelungo, la que más ha hecho por difundir su nombre, la más exportada (a la Maestranza de Sevilla y a Houston, EE UU) y la más premiada (dos galardones Campoamor y otros tantos Franco Abbiati).
El tándem de Mehta con La Fura dels Baus (Carlus Padrissa firma la dirección escénica), unido a las videocreaciones de Franc Aleu, la escenografía de Roland Olbeter y el vestuario de Chu Uroz vuelven a convocar al universo wagneriano en Valencia, después del éxito de 2007.
La producción es la misma, pero no el reparto. Repite la estadounidense Jennifer Wilson (Brünnhilde). También el danés Stephen Milling (Hunding). Los nuevos son Nikolai Schukoff (Siegmund), Thomas J. Mayer (Wotan), Heidi Melton (Sieglinde) y Elisabeth Kulman (Fricka). El coliseo los presenta como intérpretes consolidados en el repertorio de Wagner, que han cantado en La Scala de Milán, la Staatsoper de Viena o la Unter den Linden de Berlín.
Schukoff fue quien se atrevió a sustituir de urgencia a Ivan Magrí en el accidentado estreno de La traviata.
Además de las nuevas voces, el otro factor sobre el que posiblemente haya más atención es el sonido de la elogiada orquesta, que ha ido perdiendo efectivos tras la marcha de la dirección musical de Lorin Maazel y los recortes en Les Arts, de los que no se han librado. Así, de los más de noventa, hoy queda medio centenar, que se completan con aumentos.
La valquiria es la segunda de las óperas de la Tetralogía de Wagner y el título más representado de esta obra de arte total a la que el alemán dedicó 26 años. Se representará también los días 6, 9 y 16.
