Liudmila Ulítskaia, galardonada varias veces en su país, en Francia y en Italia, ya tiene en el mercado español su obra Daniel Stein, intérprete, publicada por Alba Editorial. Una novela que para crítica y lectores es ya la gran novela rusa de nuestro tiempo, y que recibió el Premio Nacional de Literatura «Gran Libro» de Rusia en 2007 y el Simone de Beauvoir 2011.

Según María Tena, directora de la colección Contemporánea de Alba, decidieron encargar la traducción a Marta Rebón por el carácter contemporáneo de la obra que «describe con gran sabiduría literaria la situación de Europa y el nacimiento del Estado de Israel después de la segunda Guerra Mundial, sin pretender ser un libro histórico. Habla de política, pero no es militante. Habla de religiones, pero no adoctrina. Es un libro poliédrico y coral, difícil de clasificar».

Esta novela, escrita en 2007 que por fin llega a España, es la reconstrucción de los sufrimientos y las ilusiones de los que vivieron el terror nazi contada en directo, a través de cartas, diarios personales, conversaciones grabadas, notas oficiales, informes, etc. Una historia cuyo tema central es la tolerancia como única esperanza después de la catástrofe.

Basada en un personaje real, Daniel Stein es un judío polaco que sobrevive al Holocausto haciendo de intérprete alemán para la Gestapo. Consigue salvar la vida a cientos de judíos del gueto de Emsk, y cuando es descubierto, huye y se esconde en un convento de monjas. Acabada la guerra, emigra a Israel convertido en monje católico, lo cual le obliga a nadar de nuevo a contracorriente y a mostrar una defensa de lo mestizo, lo que él llamó «cristianismo multicultural».

Daniel Stein, que en la vida real se llamaba Oswald Rufeisen, es el hilo conductor de la vida compleja y apasionada de un grupo de personajes.

Por eso, para Jesus García Gabaldón, profesor de Literatura de la Universidad Complutense, «esta novela de Ulítskaia es extraordinariamente innovadora y, retomando la tradición de las grandes letras rusas, tiene capacidad para influir en el resto de las literaturas».

Liudmila Ulítskaia, nacida en 1943 en Davlekánovo, criada y educada en Moscú, donde vive, confiesa que «la profesión de intérprete de su personaje no sólo se refiere a los conocimientos lingüísticos de Daniel Stein, sino a su capacidad de traducir los sentimientos de las personas para ayudarles en la solución de sus problemas. El Hermano Daniel era un elegido que con tolerancia y amor, supo hacer de intérprete para facilitar la comprensión».

Daniel Stein, que trabajó siete años con el que fuera primer Papa polaco Carol Wojtyla, recuerda al papa Francisco, porque su filosofía del cristianismo era la sencillez, la austeridad y estar al lado de los que sufren.