Representantes de la Conselleria de Economía y abogados de la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia (Cacsa) mantendrán una reunión el próximo jueves de la que, en principio, debe salir una decisión sobre la última propuesta que el arquitecto Santiago Calatrava y las constructoras han remitido sobre la reparación de la cubierta del Palau de les Arts, que sufrió el desprendimiento de parte del trencadís.

Fuentes de la administración autonómica indicaron que las empresas adjudicatarias y Calatrava les hicieron llegar a última hora del pasado viernes una nueva oferta de solución para el teatro de ópera. Ahora, los servicios jurídicos estudiarán el documento para ver si se ajusta o no a los requisitos exigidos por el Consell.

Según detalló el conseller Máximo Buch tras el último pleno del Consell, el único recubrimiento posible es cerámico (aunque no necesariamente trencadís) y debe tener una garantía de 10 años respaldada por una compañía aseguradora, el punto más peliagudo hasta ahora. Pide además un informe técnico que certifique que más allá de ese plazo el riesgo de sufrir incidencias es muy bajo. Y que el coste de mantenimiento sea bajo. La voluntad es de acuerdo, pero si no es así se iniciará la vía judicial para reclamar una compensación y se licitarán las obras de reparación para que puedan concurrir otras empresas.