Fue la punta de lanza de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Cumplió en abril 16 años de vida. Y mientras espacios vecinos más modernos, hijos también de Santiago Calatrava, languidecen entre una imagen de decadencia léase Palau de les Arts, l'Hemisfèric resiste al ocaso de los cines Imax: los de Madrid y Barcelona, propiedad de una misma empresa (Teatromax), acaban de anunciar que echarán el cierre al acabar el verano.
No es que los datos de asistencia sean extraordinarios y no haya notado la caída del consumo cultural, pero la situación de l'Hemisfèric de Valencia nada tiene que ver con la de los cines Imax de Madrid y Barcelona, aseguran sus responsables. No hay planes de cambios, agregan.
Los últimos datos de la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE), recogidos en el Anuario del año pasado, sitúan al recinto valenciano como la pantalla cinematográfica con más espectadores de España, por delante de grandes salas de cine comercial (una de las de Kinépolis Paterna aparece la tercera en el listado): tuvo 289.045 visitantes en 2012, según el estudio anual de la SGAE.
No obstante, la cifra sólo incluye las proyecciones «calificadas» de obligada notificación a la entidad de gestión de derechos de autor, pero no las producidas por técnicos propios, como las del planetario, aseguran fuentes de la Ciudad de las Artes (Cacsa). Por esa razón, elevan la cifra de asistencia en 2012 hasta las 328.000 personas.
El último ejercicio fue ligeramente peor, según los datos de Cacsa, ya que 2013 se cerró con 295.092 espectadores en l'Hemisfèric.
La subida del IVA hasta el 21 %y los efectos de la crisis en la población han hecho mella en el singular cine del complejo diseñado por Calatrava en los dos últimos años. Solo hace falta observar que en 2011 recibió 443.116 espectadores y que en 2008 fueron 498.713 (son datos oficiales facilitados por el Consell a las Corts). O sea, el descenso de afluencia en cinco años ha sido del 41 %.
No obstante, Cacsa no se rasga las vestiduras. Lo cierto es que l'Hermisfèric es, con un amplio margen de diferencia, la pantalla más vista de España (aunque no la que más recaudación registra).
En el complejo de ocio atribuyen la línea diferente de su cine a la de los Imax de Madrid y Barcelona a la influencia del entorno, ya que recibe visitantes que también van al Museo de Ciencias Príncipe Felipe o a l'Oceanogràfic. Y también al hecho de que la sala no sólo proyecta tecnología Imax, sino que también cuenta con 3D y planetario.
Añaden las fuentes de Cacsa que l'Hemisfèric no ha renunciado además a renovar su programación, de manera que cada año incorpora algún estreno, como Universo oculto, uno de los dos filmes nuevos en cartel que son producciones de 2014. La programación, eso sí, no se sale del marco de la divulgación científica que la ha caracterizado desde su apertura hace 16 años.
Con el cierre de las salas Imax de Madrid y Barcelona, sólo quedarán en España las de Leganés, Palma de Mallorca ambas de menores dimensiones y Valencia. En 2005 ya cerró la de Sevilla. En todo el mundo han echado el candado 150 pantallas de este tipo en los últimos años, según informaba El País el pasado miércoles. La razón estribaría en la falta de renovación y abaratamiento de esta tecnología. La de Barcelona ha pasado de un millón de espectadores a 130.000.
