«Más bien Valencia nos ha elegido a nosotros. Su tradición musical convierte a la ciudad en un lugar idóneo para que vengamos». Manuel Aguilar, presidente de la fundación SGAE, expresa con esas palabras sus ganas de que llegue el próximo 24 de septiembre la II edición de JazzEñe. Se trata de un festival de música jazz que nace con la intención de ser un escaparate o, más bien, un trampolín, para jóvenes talentos que todavía no han tenido la oportunidad de triunfar fuera de España.

«La finalidad, aunque de cara al público tenga formato de festival, es la promoción de los músicos españoles», explica Aguilar. El proceso consiste en invitar a ojeadores y directores de festivales europeos a que acudan al de Valencia para que incluyan en futuros carteles de otros festivales en sus países de origen a los músicos que consigan conquistarles.

La Asociación de Jazz y Música Improvisada de Francia, el seleccionador del Festival de Jazz ruso y el que se celebra en Londres, son algunos de los que llegarán a Valencia para ver qué ofrece el panorama del jazz español. «También vienen desde Bélgica, Holanda, Italia... De toda Europa prácticamente», asegura.

La II edición de JazzEñe llega abalada por la primera, celebrada el año pasado en Madrid, donde ya se consiguió que dos de los que sonaron en la capital „el pianista Chano Domínguez y el saxofonista Antonio Lizana„ llegaran a tocar en Londres y en Praga, respectivamente.

La Fundación SGAE es la organizadora de este acontecimiento, que se celebrará en el Teatro Rialto y en el que colaboran CulturArts-Generalitat Valenciana y la Universitat de València. Un total de doce conciertos de 45 minutos cada uno ambientarán el teatro a ritmo de jazz durante los tres días.

El programa de JazzEñe, además de promocionar a jóvenes talentos, también combina nombres habituales y conocidos de la escena del jazz. «Nuestro cartel es un balance entre los artistas más consagrados y el talento emergente. Esos son los parámetros del jurado a la hora de decidir quién toca. Y tratamos de incoporar en la selección, a artistas de toda la geografía española», afirma Aguilar.

La música jazz es un género que, tradicionalmente, no ha gozado de un espacio amplio en la programación de festivales españoles. Sin embargo, esa afirmación está quedando cada vez más obsoleta gracias a eventos como el de la próxima semana, el Festival de Jazz de Vitoria „que inició en 1977„ o el que se celebra en el Palau de la Música de Valencia, Seagram's Gin Jazz-Festival, que este verano cumplió su decimonovena edición.

Los encargados de estrenar el escenario serán AupaQuartet, un grupo de cuerda centrado en la composición e interpretación de música moderna. Sus diferentes lugares de procedencia, culturas y gustos musicales les hacen inspirarse en el jazz, el funk, el Son Cubano o el flamenco para desarrollar un estilo propio.

Le siguen otros artistas como Alexei León Quintet, Yelo, Sir Charles +3 o Albert Sanz, un trío integrado por el valenciano que da nombre al grupo. «No se puede describir la música. Pero lo particular de la nuestra es la incorporación del cajón», explica Albert Sanz. Normalmente, en el jazz, los tríos con piano están complementados con un contrabajo „a ritmo de Rubén Carles„ y una batería. En este caso se sustituye el último instrumento por el del percusionista Sergio Martínez. El resultado de su música es una fusión del jazz moderno con el flamenco y el folclore mediterráneo, que sonará en el festival de jazz junto con el resto de grupos con el fin de, según Aguilar, «apoyar a lo que el circuito comercial no valora, eso es lo que pretendemos».