José Miguel G. Cortés mira sonriente a la cámara en la fotografía que el IVAM difundió ayer, después de la reunión del consejo rector del museo. No es para menos. El órgano dio luz verde al plan de compras de arte del director, uno de los objetivos por los que viene peleando desde hace meses y que le llevó a criticar en público a los anteriores gestores (populares) de la Conselleria de Cultura (fue después de perder la mayoría en las elecciones autonómicas).

El tiempo apremiaba. O el consejo rector aprobaba antes de fin de año las adquisiciones o el dinero reservado en los presupuestos (120.000 euros, inicialmente) no podría ser destinado a este fin.

Cortés, que no ha conseguido como pretendía una modificación del citado órgano, dominado en número por representantes de instituciones políticas „el conseller Vicent Marzà sí que ha anunciado que modificará la ley del IVAM en ese sentido, pero el trámite requiere tiempo„, al menos ha vistó cómo la conselleria se apresuraba a nombrar consejo asesor.

Este era el que, según un informe de Intervención de la Generalitat, debía avalar el plan de compras de arte del director. La exconsellera María José Català esgrimió en junio el argumento de que no existía „pese a que estaba previsto formalmente desde 2012„ para aparcar la propuesta de adquisiciones de Cortés, lo que provocó la reacción airada de este.

Ahora, después de que el recién creado consejo asesor diera el visto bueno el día 6 a las compras de Cortés, faltaba el placet del consejo rector. Es lo que llegó ayer tarde.

Finalmente, gracias a ahorros de otras partidas, el IVAM gastará 149.104 euros en la adquisición de siete obras: dos fotomontajes de Martha Rosler, la pieza Rock ´n´ Roll 70 de Gillian Wearing „estas obras se han exhibido en el museo este año„, tres fotografías del venezolano Alexander Apóstol „él dona cuatro de la serie„ y la pieza Panorama Social del valenciano Mira Bernabeu. El criterio ha sido el de cubrir lagunas en la colección de los últimos años.