Ha sido el peor año de su vida, pero acaba de empezar uno nuevo. Y ahora este icono valenciano de la moda «made in Spain» vuelve a estar contento y motivado. Así lo contó ayer Francis Montesinos en una entrevista concedida a Eugeni Alemany en El selfie, un programa de Levante TV que, como cada domingo, entrevista a un personaje relevante de la actualidad valenciana. «He tenido que empezar de cero después de cuarenta años», cuenta Francis Montesinos.

La causa que se abrió contra él por supuesto abuso sexual de menores se sobreseyó, aunque en febrero de 2015 se reabrió de nuevo, hecho calificado por el diseñador como «una calumnia».

A pesar de que la causa ya esté archivada y el juez lo declarara inocente en noviembre del mismo año, al diseñador le cuesta empezar a hablar del tema, aunque arranca quedándose con lo positivo: «Lo único bueno de toda esta historia es que he sentido cerca a la gente que me quiere. Ahora sé que están ahí para lo que necesite».

Todo empezó en junio de 2014 cuando fue detenido por la Guardia Civil en su casa de Llíria. «Se presentaron policías en mi casa con perros y me dijeron que no podía abandonar el país». A partir de ahí todo fue a pique para el diseñador valenciano. Cerró su tienda después de cuarenta años de trabajo, los comerciales devolvían sus productos, le negaban contratos y fue solo el principio. La empresa dejó de tener ingresos, aunque «el dinero se puede recuperar, pero ahora voy a tener que vivir con esto toda la vida. Ha sido muy duro, horroroso».

Ahora es tiempo de nuevos proyectos. El diseñador está inmerso en crear la marca personal del empresario y bajista de la banda de rock Kiss, Gene Simmons. «Cuando todo acabó cogí la maleta y me fui a EE UU. Y un día me llamó Gene Simmons para pedirme una colaboración. Ese proyecto me ayudó mucho a salir del otro tema», recuerda Montesinos durante la entrevista de ayer por la noche.

También hubo tiempo en El Selfie para recordar su juventud. En los 80, fue uno de los grandes junto a Alaska, Almodóvar, los hermanos Berlanga y compañía, de La Movida madrileña. Hablaron de su juventud, de sus inicios en el mundo de la moda y sobre cómo ha tratado España a este sector. «La moda siempre ha estado lejos de la calle, de los museos, de la gente... Todo lo contrario a otras ciudades del mundo», critica. Al ser preguntado por Valencia, la define como «una ciudad donde bajaron las persianas y apagaron las luces».