Esta semana, que concluye con la ciclogénesis explosiva que se desató el viernes a cuenta de la formación del nuevo gobierno y el compás de espera que se ha abierto en la elección de nuevo presidente, comenzó con la mala noticia del fallecimiento de Julián Melero ´El Toronto´, uno de los toreros cómicos más importantes de la historia. Comenzó su carrera en la célebre banda de El Empastre. Posteriormente ingresó en Los Bohemios, y más adelante formó su propio grupo, El Toronto y sus monos toreros. Un espectáculo con el que recorrió durante muchos años todas las ferias de España y América. Excelente profesional y mejor persona, fue el último grande en esta especialidad.

Mientras tanto, en Valencia sigue también el compás de espera en lo que a los carteles falleros se refiere. Mañana, la empresa los presentará en la Diputación, de cara a obtener la preceptiva aprobación y poder hacerlos públicos en breve. Faltaban algunos flecos por cerrar, como el de concretar quién actuará finalmente el día 16. En principio estaban previstos El Soro junto a Román y Jesús Duque. Esta semana se habló de Perera, pero parece que entrará en él Daniel Luque, en detrimento del coletudo de Requena.

Entre tanto, la empresa Gestión Universal de Espectáculos, responsable de la plaza de Castelló, presentó el martes los carteles del abono de la Magdalena. Un ciclo que se desarrollará entre el 28 de febrero y el 6 de marzo, y se compondrá de cuatro corridas de toros (una más que el pasado año), otra de rejones, una novillada picada y otra de promoción. Un serial en el que destacan las ausencias de Morante de la Puebla y El Juli, pero en el que no faltarán toreros como Enrique Ponce, Castella, Manzanares, López Simón, Roca Rey, Talavante y Cayetano. El novillero local Varea actuará en solitario y se producirá la alternativa del castellonense Vicente Soler. Alberto Ramírez, gerente de la empresa, destacó en la presentación tanto: «El esfuerzo que supone incluir un festejo más, en este momento de recortes por todos lados. Y asimismo la apuesta por la juventud, por el futuro. Hay que darle sitio a los valores emergentes».

Y tampoco ha faltado esta semana la consabida ración de cerrilismo antitaurino. Al margen de la decisión del Ayuntamiento de Madrid de quitar los toros de su página de información turística, la coalición que gobierna el Ayuntamiento de Córdoba, formada por Ganemos, PSOE e Izquierda Unida, presentó una moción para que se lleve a efecto la «prohibición de espectáculos con animales» y se declare de este modo a Córdoba «ciudad libre de circos», en clara alusión a la no financiación de espectáculos taurinos. Lo cierto es que sólo se estaba financiando con 18.000 euros el festival de la Asociación Española contra el Cáncer. Ciudadanos, Grupo Mixto y PP votaron en contra de esta moción y, ante el empate, decidió el voto de calidad de la alcaldesa, Isabel Ambrosio, de Ganemos. Al menos la Junta de Andalucía ha salido al paso, afirmando que continuará con la financiación y el apoyo a la difusión de la fiesta de los toros y se mantendrá el fomento y divulgación de la cultura taurina y el apoyo a las escuelas taurinas.

Como reacción a todo esto, la Unión Taurina de la Comunitat Valenciana ha convocado una manifestación a favor de la fiesta de los toros, en todas sus variantes, tanto en la plaza como las diversas modalidades de festejos de bous al carrer. Será el domingo día 13 de marzo en Valencia. Esta marcha reivindicativa recorrerá las calles de Valencia a partir de las tres de la tarde y concluirá con la lectura de un manifiesto en el mismo ruedo de la plaza de toros. Su lema es: «Los Toros, Cultura, Raíces y Libertad de un Pueblo». Esta marcha tiene como objeto la protesta ante los continuos ataques, insultos y desprecios que sufre el mundo taurino. Una convocatoria se hace extensiva a todos los aficionados y a todo el sector taurino de España, con la pretensión, según sus convocantes, «de hacerse oír ante todo el panorama político y social del conjunto de Comunidades Autónomas, pues los ataques a los toros se están produciendo en casi todas ellas». Aquí también se abre otro compás de espera, de cara a ver cuál será la respuesta de los colectivos taurinos. El año pasado, en Castelló, aficionados y peñas cumplieron con creces. Pero toreros y taurinos no supieron estar a la altura. Veremos.