Más corazón, menos complejos. La Habitación Roja hace años que se despreocupó por el ruido de fondo ante su estilo y sus obsesiones: el amor, sobre todas las cosas. Instalados en la zona noble de la música estatal como unos veteranos del panorama indie, refuerzan sus señas de identidad en un trabajo que verá la luz en primavera. Sagrado Corazón será el disco después de cumplir veinte años, de celebrar una progresión regular ascendente, y si algo parece claro en el conjunto es que no hay necesidad de reinventarse.

Por eso anuncian que en este nuevo LP le darán todas las vueltas posibles al verbo «amar», hasta convertirlo incluso en «lamento provocado por la pérdida o la añoranza», esgrimían ayer en un comunicado.

Sí que se esperan, sin embargo, matices nuevos en el sonido del grupo, como un ligero coqueteo con la música de baile, presente por ejemplo en el single You gotta be cool, aunque sin soltar amarras del pop-rock en el que han habitado durante toda su trayectoria.

Dicen que «luz, sol, amistad y amor», son los ejes sobre los que gravita su nuevo disco, dentro de un universo reconocible en el que se vuelven a colar postales de Valencia. La Albufera, en concreto, separa al grupo de su idiosincrasia urbana en el primer tema del disco y lo arrastra hacia el paisaje bucólico por excelencia a esta orilla del Mediterráneo. El trabajo, en diez pistas, estará disponible en formato digital y físico, incluyendo una caja para coleccionistas con cinco vinilos; se comercializará a partir del 1 de abril.

No han pasado casi ni dos años desde que el grupo editó La moneda en el aire, uno de sus trabajos más celebrados, y el cual enlazaron con la fiesta por las dos décadas de vida musical. A partir de la primavera, por tanto, se espera el retorno a los escenarios „incluidos todos los festivales posibles„ de una banda especialmente prolífica. Ellos mismos recuerdan en las entrevistas que nunca vuelven a los escenarios, porque nunca se bajan de allí.