El Sorolla que no se ha visto en público durante más de cien años se quedó ayer sin comprador en la subasta de Bonhams. La obra Un hebreo no llegó al mínimo que la casa de subastas esperaba recaudar, entre 300.000 y 500.000 libras (384.788 y 641.313 euros), por lo que decidieron retirarlo. La oferta más alta por la pieza del valenciano se quedó en 260.000 libras (336.666 euros).

La obra de Sorolla tiene un valor añadido, ya que, como apuntó el director de la subasta, Peter Rees, «solo se había visto antes a través de fotografías en blanco y negro». Un hebreo muestra el rostro de un varón de edad avanzada con la cabeza cubierta por un turbante blanco y el cuerpo por una capa de color verde esmeralda. En 1898 el artista plasmó este cuadro que forma parte de una época en la que culminó algunos de sus óleos clave como Pescadores valencianos (1895) y Niños en la playa (1910). La obra, en la que se aprecia la influencia de José de Ribera, ha estado siempre en manos privadas sin ser expuesta.