El actor y mago valenciano Nacho Diago se llega este domingo al Talia con su espectáculo Viaje a la luna, un recorrido selenita a estrenar en plena resaca fallera, «pero será un descanso para el espectador venir a vernos», reconoció Diago. Se trata de un montaje que combina magia y humor. «La luna es un satélite de culto, romántica, invocada, admirada y musa de inspiración. Yo me baso en ella para hacer un viaje imaginario lleno de ilusión. Un viaje desde el escenario, pero derribando la cuarta pared para que el público acceda a él participando en el recorrido. Y les recibo con todo respeto, por supuesto», manifestó el actor.

Intérprete de algunos capítulos de Amar en tiempos revueltos o L´Alqueria Blanca, Diago reconoce que esta faceta le ayuda en su trabajo como mago. «Es algo que juega a favor mío. Hablo mucho, como todos los magos, pero para tener el control del espectador. Y es normal que se añada el humor a la magia. Todos tenemos como referente al gran Juan Tamariz en ese aspecto», apuntó Diago.

El mago, además, abordó la diferencias entre ilusionismo y prestidigitación. O mejor dicho, la falta de diferencia entre ambas disciplinas: «Está claro que la prestidigitación es la habilidad con los dedos en juegos de los llamados de cerca, y el ilusionismo es provocar ilusión. Pero todo es magia. Los magos nos pasamos juegos unos a otros, pero también tenemos juegos propios que no cedemos a nadie. En Valencia hay muy buenos magos, como James Garibo o Yunke. Éste último está reconocido en el mundo entero», aseguró.

En Viaje a la luna, Nacho Diago rinde homenaje a personajes que tuvieron mucho que ver con el satélite. «Como Georges Méliès, que ya soñó con viajar a la luna en 1902, o Neil Armstrong, el primer hombre que la pisó. Pero todo desde el punto ilusionante de la magia. Hay proyecciones en un gran pantalla y ambientación al efecto. Los magos suelen disfrazarse par actuar, ignoro por qué, pero aquí yo también llevo una vestimenta especial», confesó el mago.

El montaje permanecerá en el Talia hasta el lunes 4 de abril y el mago se valió del tópico para calificarlo: «Es un espectáculo familiar para niños de 2 a 99 años».