Levante-EMV

Levante-EMV

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

"Este niño es un muñeco"

Una juguetera valenciana fabrica bebés «reborn» con textura, peso y rasgos reales - Están indicados para público infantil y uso terapéutico en adultos

"Este niño es un muñeco"

«Es un muñeco» ¿Cuántas veces se ha dicho esta frase al referirse a un bebé recién nacido? Cierto es que el término «muñeco» en ese caso hace alusión a la ternura que inspiran los neonatos. Sin embargo, en los últimos años habría que prestar más atención a la criatura por si la frase resulta literal.

De un tiempo a esta parte, se han puesto de moda los baby reborn, unos muñecos hiperrealistas que se asemejan a bebés de verdad. La juguetera valenciana Muñecas Guca se ha sumado a la tendencia „que empezó a popularizarse en Estados Unidos en los años 90„ y acaba de presentar sus Baby Reborn, una línea de muñecos que podrían confundirse con un recién nacido.

«Sorprenden especialmente por su realismo y probablemente revolucionen el mercado muñequero de nuestro país, ya que en el resto de Europa son un género de muñecas más reconocidas y en España están empezando a serlo», explican desde la compañía de Onil.

La línea que ahora presenta la juguetera valenciana incluye diversos modelos, cuatro niñas y dos niños, aunque «lo que más se solicitan son las niñas», señalan las mismas fuentes. El realismo de estos muñecos es tal que hasta sus dimensiones se asemejan a las de un bebé de verdad: pesan 1,8 kilos y miden 46 centímetros. Además, tienen características especiales como los pequeños movimientos que han incorporado a los muñecos, como la caída de la cabeza de los bebés de verdad y movilidad en sus brazos y piernas.

El público, según Muñecas Guca, es variado. Estos «bebés» son para niños y adultos. «Los muñecos Reborn representan una nueva tendencia en muñecos hiperrealistas pensados tanto para niños como adultos, ya que pueden aportar diversos beneficios a ambos públicos», sostienen.

Los beneficios de este tipo de muñecos para las personas adultas «son múltiples e incluso pueden utilizarse con fines terapéuticos ya que poseen propiedades de relajación similares a las sensaciones de tener un bebé en los brazos, en definitiva, despierta emociones», explican.

«De hecho, han sido utilizados por madres primerizas en el proceso de adaptación a los bebés, por matronas para preparar las clases de preparto y los cuidados al recién nacido, y por psicólogos para tratar problemas de déficit de atención, depresión y ansiedad».

«Además, estos muñecos también pueden formar parte de la terapia en niños autistas o con algún tipo de retraso, para fomentar la atención, la empatía y la socialización», destacan.

De hecho, apuntan, «en EE UU este tipo de muñecos también se utilizan en las terapias con enfermos de alzhéimer, de modo que con el muñeco reviven momentos de su infancia o maternidad, ayudándoles a combatir su aislamiento y soledad».

Los ejemplares de estos muñecos son también «carne» de coleccionista, que aglutinan «bebés», bien fabricados en vinilo o silicona, que se asemeja más a los tejidos humanos.

El precio de los muñecos que la firma valenciana ya comercializa oscila entre lo 70 y 140 euros, en función del modelo. Sin embargo, por la red existen ejemplares de otras firmas que pueden ir desde los 300 hasta los 3.000 euros.

Compartir el artículo

stats