De la carpa a grandes auditorios. Es el triple salto que ha dado la banda del Circo Gran Fele, que el próximo 10 de abril debuta en el Palau de la Música con un concierto de ritmos circenses.

La veterana compañía del circo pondrá en escena Music maestro please, un espectáculo ideado para el auditorio valenciano dentro de su ciclo de Música en familia. La función contará con seis músicos sobre la escena—algunos con dotes de payaso—, y que interpretarán obras del mundo del circo de autores clásicos y contemporáneos e instrumentos usados en el mundo de los payasos de circo.

Según explica a Levante-EMV el director del Circo Gran Fele, Rafael Pla, «la historia de la música en el circo es muy amplia y la intención de este concierto es condensarla en cerca de una hora y cuarto».

Juguetes y un serrucho

Pla señala que sobre el escenario sonarán instrumentos como organillos de viento, violas Strog, baladines e, incluso, instrumentos de juguete. Pero va más allá y asegura que harán música hasta con un serrucho.

La tradición del Gran Fele va íntimamente ligada a la música. De hecho, señala Pla, «somos los únicos que llevamos música en directo, que recuperamos esa tradicional musical en el mundo del circo».

Pla adelanta que las composiciones que se podrán escuchar el próximo día 10 serán «muy reconocibles para el gran público». Sonarán piezas tradicionales del circo, así como otras propias de la compañía valenciana. Y como regalo para los asistentes al concierto, habrá un tema inédito.

El responsable del Circo Gran Fele señala además que el concierto no es solo para los más pequeños e insiste en que es un espectáculo también apto para adultos. «Es un error pensar que el circo es solo para niños. Nuestros espectáculos son para todas las edades. Y este concierto también».

Respecto al salto a las tablas de un auditorio como el Palau de la Música, acostumbrado a otro tipo de espectáculos, Pla espera que este concierto marque «un antes y un después». En esta línea, reivindica que el número del circo no es solo lo que se ve bajo una carpa, sino un cúmulo de aspectos «muy importantes, como la música que lo acompaña».

Pla avanza que el espectáculo no estará solo sobre el escenario del auditorio, sino que el público «interactuará activa y pasivamente con los artistas». En definitiva, un concierto de música «tradicional», pero sobre todo un espectáculo de «pura diversión».