El informe de Intervención de la Generalitat sobre la gestión de Consuelo Císcar en el IVAM desveló hace casi un año que 211 obras del museo estaban cedidas en diferentes instituciones, algunas de ellas privadas.
El museo, habituado ya al plan quijotesco de desfacer entuertos, ha rescatado 46 piezas en los últimos meses. En especial, ha cancelado los depósitos que mantenía en dos entidades privadas: el Consejo de Cámaras de Comercio de la Comunitat Valenciana (tenía 6 cuadros) y la Autoridad Portuaria de Valencia (siete piezas).
La retirada está justificada porque los interventores alertaban en su informe de que «el depósito de obras en dependencias restringidas se aleja de las funciones museísticas y de custodia señaladas en la ley de creación del instituto».
Así, cuatro pinturas de José María Yturralde, dos de Antoni Tàpies y una de Manolo Valdés que estaban en las instalaciones del organismo portuario ya han regresado al IVAM. Lo mismo ha sucedido con las dos piezas de Eduardo Arroyo, las dos de Hernández Mompó, otra de Javier Chapa y una más de Juan Barberá que estaban hasta hace pocos meses en la sede del Consejo de Cámaras.
En la actualidad, según la información oficial a la que ha tenido acceso Levante-EMV, más de 160 obras de la colección del IVAM permanecen en depósito en otras instituciones públicas valencianas.
Las Corts, entidad con la que el museo mantiene un convenio desde hace años, es el principal destinatario de obra del centro de artes. Conserva en la actualidad 94 piezas. Y eso que, ya en la etapa de José Miguel G. Cortés como director del IVAM, se han retirado ocho. Algunas, por necesidades de programación „una pintura de Armengol tenía que exponerse en la muestra sobre Colectivos artísticos valencianos bajo el franquismo„ o de conservación, o por cambios en el despacho, como una del Equipo Crónica que colgaba en el de la vicepresidencia primera.
Los departamentos de Registro y Restauración del IVAM revisan cada seis meses la ubicación y el estado de conservación de las obras prestadas. En función de ello, recomiendan su devolución o préstamo.
Treinta pinturas de Ignacio Pinazo Camarlench y otras tantas fotografías de Joan Antoni Vicent (sobre localizaciones de Valencia) forman el grueso del patrimonio cedido al Parlament.
El Ayuntamiento de Valencia mantiene dos esculturas de Gerardo Rueda en el Jardín del Turia. La Ciudad de la Justicia se quedó en octubre sin una escultura de Andreu Alfaro que pasó a pocos metros, al Palau de les Arts, después del acuerdo entre la ópera y el museo por el que ocho obras se exhiben ahora en los espacios públicos del coliseo. La Ciudad de la Justicia conserva dos esculturas (de Valdés y Rueda) y cuatro pinturas (de Juana Francés).
Cinco versiones de Marilyn forever de Antonio de Felipe están prestadas a Presidencia y se reparten entre el Palau de la Generalitat y la sede de la vicepresidencia en la plaza de Nules. Equipo Crónica, Navarro, Valdés o Sanleón están también entre los autores de las 17 obras en depósito.
En el Consell Jurídic Consultiu se ha retirado una de Arroyo por necesidades del IVAM, pero conserva otras 10: Carmen Calvo y varias de Alberto Corazón, Díaz-Caneja, Toledo o Rosa Torres, entre otras.
El museo ha retirado 14 piezas de la Conselleria de Hacienda por el cierre de la sede de la calle Micalet (algunas de Pérez Contel, Salvador Victoria o Manolo Gil). Mantiene nueve, entre las que destacan otras dos de la serie Marilyn forever de De Felipe. De esta forma, siete de las doce que compró en 2006 están hoy diseminadas en varias dependencias públicas. El IVAM pagó por ellas más de 140.000 euros.
El museo es el suministrador de nueve obras que decoran hoy las dependencias de la Conselleria de Educación y Cultura. Otras seis están prestadas en el Institut Valencià de Finances (IVF). En total, nueve instituciones públicas lucen arte en salas y despachos gracias a la colección del IVAM.
