El Consell Valencià de Cultura (CVC) dio ayer el visto bueno a un informe sobre la inclusión del jazz en las enseñanzas profesionales de música, texto que defendió Ximo Tébar, miembro del organismo y profesor de la especialidad en el Conservatorio Superior Joaquín Rodrigo de Valencia.

El documento apela a un «cambio-adaptación» en los currículos de las enseñanzas profesionales de Música mediante la inclusión de contenidos que preparen y formen a los alumnos que desean cursar la especialidad de jazz en el grado superior, donde esta sí está regularizada e implantada.

Cumplir la normativa

Según el documento, la especialidad de jazz en las Enseñanzas Superiores entró en vigor mediante la Ley Orgánica 1/1990, de 3 de octubre, de Ordenación General del Sistema Educativo Logse, publicada en el BOE el 4 de octubre de 1990. Esta ley regula y establece la especialidad de jazz en las enseñanzas superiores de Música, pero, «paradójicamente», el jazz no se contempla en el campo de las enseñanzas musicales previas.

«Esta circunstancia no solo resulta contradictoria en sí misma, sino que además contradice, en varias ocasiones, la normativa planteada en la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo», defiende el informe. El texto que expuso Tébar destaca asimismo que la normativa defiende que la citada ley tiene como finalidades la formación, la orientación y la preparación. Es precisamente en este último aspecto en el que el informe quiere incidir para que la formación en jazz en los estudios medios sirva de preparación para aquellos alumnos que, en grado superior, quieran especializarse en jazz.

En esta línea, Tébar lamenta que «no existe preparación reglada previa al grado superior en la especialidad jazz. La actual asignatura optativa Música y creatividad, programada en el último ciclo de las enseñanzas profesionales, es insuficiente. Con un solo curso se pretende cubrir las enseñanzas de jazz en ciertos conservatorios y centros de enseñanzas profesionales, para, en teoría, orientar al alumno hacia el grado superior en esta especialidad».

Al respecto, los alumnos interesados «se introducen y estudian el jazz en academias privadas o a nivel individual y particular de forma autodidacta; o viajando a otros países donde sí está normalizada la formación del estilo. De hecho, la gran mayoría de los alumnos que superan las pruebas de acceso al grado superior de jazz, provienen de escuelas privadas o de clases particulares con los especialistas del género», explica el reconocido músico valenciano. Según Tébar, «existe una tendencia de los jóvenes músicos (alumnos-educandos) asociados a Sociedades Musicales de la Comunitat Valenciana a la creación de formaciones o big bands vinculadas a la banda. Esta iniciativa, en muchos casos, se lleva a cabo con el esfuerzo de los propios alumnos, que sufragan ellos mismos los gastos del director-educador especialista en jazz». Además, asegura que se ha constatado «la inexistencia de puestos de trabajo y oferta laboral en el sector educativo musical para los profesionales de este sector, así como para los que actualmente acaban la titulación superior en la especialidad de jazz».

Al respecto, apunta que existen disciplinas, oficios y opciones laborales que están vinculadas mayoritariamente al conocimiento y dominio de las formas, estructuras y tendencias de la música jazz.

«Una correcta educación en jazz puede potenciar los resultados en aquellos músicos que decidan especializarse en otras músicas como música barroca, tradicional valenciana, producción musical»..., defiende el informe que ayer aprobó el CVC. Entre las opciones que crecen con los conocimientos de jazz, Tébar destaca la música cine, televisión, radio, publicidad o videojuegos, así como apunta que el jazz abre puertas a la dirección de big bands, música pop, popular tradicional, de teatro y danza, o bien para profesiones encaminadas hacia la producción discográfica.

Además, señala el informe, «resulta curioso que la administración pública haya tenido en cuenta medidas para el fomento de estilos como el rock, el pop y otros ‘dialectos’ del jazz sin que se haya tenido en cuenta que dichos estilos son fruto de las fusiones provenientes» del género, «madre de la mayoría de músicas actuales». «El jazz es la música de donde provienen los estilos modernos actuales y desde donde se deberían aprender realmente los estilos descendientes», asegura Tébar.

Formaciones estables

Tébar apuntó también que sería recomendable «animar e incentivar» a las Escuelas de Música la Comunitat Valenciana para que introduzcan el jazz en sus programas educativos, al tiempo que pidió la creación de formaciones estables de jazz o big bands de titularidad pública, o bien subvencionadas por las entidades públicas y en las Sociedades Musicales de la Comunitat Valenciana. En la investigación y elaboración de este informe han colaborado Josvi Muñoz (profesor de clarinete, graduado en el Berklee College of Music de Boston y fundador-director de L’Aula de Jazz en Valencia), los profesores de jazz del CSMV Ramón Cardo y Santi Navalón, así como José Pruñonosa (licenciado en composición, máster en investigación musical por la UPV, doctorando especialista en jazz), entre otros.

Por otro lado, el CVC propuso la creación de una red de museos valencianos que autorice la apertura de nuevas colecciones o determine su cierre. Asimismo, se propuso preguntar al Museo de Bellas Artes el motivo por el cual ha prescindido recientemente del nombre San Pío V.