Pasadas las tres de la madrugada, la flamante ganadora del último Planeta atravesaba la puerta giratoria del hotel Juan Carlos I con el codiciado trofeo del orbe abrazado entre sus manos y el pecho, como una criatura recién nacida. «Voy a dormir con él, solo con él» y pensando en los 601.000 euros, puntualizó alguién cuando ya no lo podía oir la triunfante escritora. Dolores Redondo reconocía horas antes, ante el selecto auditorío presidido por los Reyes y el presidente de la Generalitat, que siempre soñó con ser la reina en la fiesta del Premio Planeta. Nadie duda que la novela de la donostiarra Todo esto te daré será un éxito de ventas, pero el finalista le ganó el discurso. Marcos Chicot, hasta ahora un escritor selecto, dedicó El asesinato de Sócrates a su hija Lucía de siete años con sindrome de Down y se ganó el respecto. Además con un aire a lo Pedro Sánchez con gafas, aunque con el don de la palabra, consiguió la simpatía de las bases letraferidas. El escritor madrileño encima fue capaz de hacer una ficha de su libro „una historia ambientada en la Grecia del año 437„ con la suficiente atracción para leerla sin parar. Chicot, economista y psicólogo clínico, tiene fieles seguidores desde otro crimen, El asesinato de Pitágoras, que se autopublicó en 2013 en Amazon tras quedar cuarto en el Planeta de 2012 y alzarse como un e-book de los más vendidos en España. Desde entonces era objeto de deseo de la editorial.
Aunque la protagonista de la noche y los próximos días es Dolores Redondo, una escritora de emociones fáciles pero tremenda en sus relatos, incluido Todo esto te daré. La superventas de la trilogia del Baztán con la inspectora de la policia foral navarra Amália Salazar como protagonista „El guardia invisible, El legado de los osos y Ofrenda a la tormenta„, firma una novela negra al estilo de Agatha Christie, donde un conocido escritor investiga un aparente accidente de tráfico, con la inestimable ayuda de un guardia civil a punto de jubilarse y un cura. Redondo lleva la acción a la Galicía rural, la Ribeira sacra, para desde allí conquistar el mercado editoral en español. La vasca, con parentescos gallegos, cuenta con tanta pasión la historia ganadorada que va a multiplicar por tres a sus lectores actuales (ha vendido más de 700.000 ejemplares de su famosa trilogía, que se ha traducido a decenas de lenguas y ha inspirado una película que se estrena en marzo).
El gran sello editorial vivió otro evento feliz, el de su 65 edición, donde volvió a demostrar un poder de convocatoria único, capaz de aunar a los poderes del Estado (Reyes, presidenta del Congreso, vicepresidenta del Gobierno y primera autoridad de Cataluña), con la matería gris de la factoría cultural más eficaz, sin descuidar el planeta de las finanzas y las celebridades ilustradas. Barcelona es por una vez al año la capital mundial del español, gracias al Planeta, y Puigdemont sin despeinarse, pese a que en los postres la organización repartiera la novela Los Austrias de José Luis Corral.
