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Entrevista

Susu: "Me gusta transmitir valores a través del arte"

«Hay que educar a los niños para que aporten y mejoren nuestro entorno»

Susu: "Me gusta transmitir valores a través del arte"

Autora de cuatro álbumes „En la arena (2005), Calma (2007), Bosque vacío (2012) y Mi habitación (2015)„ Susu retoma el libro disco infantil. Este camino ya lo inició con La media luna y las estrellas (2010) y La media luna se va de viaje (2012). Vuelve con Mundo y Niña Mariposa, con ilustraciones de Glòria Falcón y editado por Alba. Mucho más que un cuento para niños con toques mágicos, es un grito a la defensa urgente de la naturaleza.

¿Cómo surge «Mundo y Niña Mariposa»?

Es un cuento que escribí hace tres años y que surgió por mi interés de hacer algo relacionado con el medio ambiente, algo de primer orden en estos momentos. Una compañera me habló de las mariposas monarca generación matusalén. Son más grandes y viven el doble que una mariposa común. Son capaces de hacer grandes migraciones, de Canadá hasta México. Incluso pueden atravesar todo el océano y asentarse en las Islas Canarias. La población de estas mariposas se ha reducido al 10 % debido a los pesticidas, tala de árboles,... La planta de la que se alimentan está llena de tóxicos y mueren. Esta historia me pareció interesante para que los niños vayan adentrándose en cuidar la naturaleza y estar en contacto con la flora y fauna.

Los protagonistas son muy especiales.

Sí. Mundo es un niño científico, muy diferente a los héroes de cuento. Es muy curioso; tiene un laboratorio, cura a animales,... Me pareció bonito que niños con este carácter e intereses se identifiquen con él.

Además, juega con la magia de la ficción a través del personaje de Niña Mariposa.

Ella es una mariposa que se convierte en una niña. Le da el mensaje a Mundo para que ayude a las mariposas. Me gusta transmitir valores como este a través del arte y la poesía. Además, la mariposa tiene una simbología muy interesante detrás. Con ella, por ejemplo, puedes explicar a los niños el fenómeno de la muerte.

La naturaleza no es solo el escenario, sino un personaje más de la historia.

Así es. La niña sería la naturaleza que está pidiendo ayuda. Es una niña muy bonita, porque creo que tenemos un planeta maravilloso lleno de tesoros. Nuestra generación se encontró un mundo complejo; hemos hecho lo que hemos podido pero no hemos resuelto el problema. Nuestros hijos se van a encontrar con un mundo más complicado. Está bien avisarles, concienciarles y que aprendan a reciclar y denunciar las cosas.

¿Cree que faltan cuentos que tengan más mensaje, más allá del niño superhéroe?

Sí. O son superhéroes con poderes o se han enfadado con sus padres. No he visto libros para niños de cierta edad que quieran ser médicos, enfermeras,... Quería que Mundo fuera un niño muy cercano. Me gustaría poder llevar este personaje a otras aventuras.

Aunque va dirigido a un público infantil, el trasfondo de respeto a la naturaleza es universal y sin límite de edad.

Exacto. A los adultos creo que les puede hacer reflexionar. Hay mucha gente que ha tirado la toalla y es importante no tirarla nunca. Si todos dejáramos de contaminar, el cambio climático no pararía inmediatamente, pero sí podemos cambiar nuestra forma de actuar para que dentro de mucho tiempo todo pueda mejorar. Hay que educar nuestros hijos para que ellos aporten algo y mejoren el entorno.

Las ilustraciones de Glòria Falcón dan una halo mágico a la historia.

El reto era hacer un tipo de ilustración para un niño más mayor y lo ha resuelto muy bien.

El libro va acompañado de un disco con canciones y el relato del cuento.

Sí. Lo ideal sería leerlo y escucharlo. La última pista es el cuento narrado para niños con dificultades de lectura o de vista para que conozcan bien la historia.

Une aquí sus dos pasiones: música y literatura.

Me produce mucho gusto hacer este tipo de trabajo. La literatura y la música si van de la mano es lo que más me gusta.

¿Qué proyectos tiene en mente?

Estoy trabajando en una novela juvenil de ciencia ficción. Se sitúa en Japón y tiene también un punto de denuncia ecologista.

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