Tras del Año Pinazo —en conmemoración al centenario de la muerte del pintor—, llega el de otro de los referentes culturales valencianos. El próximo 29 de enero se cumplirán 150 años del nacimiento del escritor Vicente Blasco Ibáñez (Valencia, 1867-Menton, 1928). Para celebrar la efeméride, desde la Fundación Centro de Estudios del autor de Cañas y barro se han programado una serie de actividades, que han contado con el respaldo institucional y económico del Ayuntamiento de Valencia.

Según avanzó a este periódico el secretario de la fundación, Ángel López, la entidad lleva ya dos años trabajando por sacar adelante un conjunto de iniciativas que sirvan de homenaje a la figura del escritor. Tiempo que se ha cristalizado en reuniones semanales con el Ayuntamiento, una comisión de trabajo y un conjunto de actividades ya confirmadas.

Aunque Blasco Ibáñez, a pesar de su repercusión cultural, no tendrá un año «oficial» como sí lo ha tenido Pinazo, con declaración como tal en las Corts. Sin embargo, sí hubo en abril en el parlamento valenciano una «invitación» a las instituciones valencianas a sumarse a las celebraciones con motivo del aniversario.

Las actividades previstas por la fundación y el Ayuntamiento comenzarán el próximo 28 de enero, fecha de la muerte del autor de Entre naranjos, con el habitual homenaje en el cementerio de Valencia.

Casi al mismo tiempo, la Biblioteca Valenciana inaugurará a finales de enero la exposición Vicente Blasco Ibáñez. Un valenciano universal, comisariada por Emilio Sales y Ángel López. Programada hasta mayo, la muestra se exhibirá en la sala capitular de la biblioteca y contará dos partes. La primera se centrará en el autor y en la Valencia de su tiempo y se articula alrededor de diversas facetas de Blasco Ibáñez: como político, como periodista, como editor, como autor y la relación de estas actividades con sus viajes. La segunda trata del impacto de la vida y obra de Blasco en diversos ámbitos: en la literatura, en el cine o en la política.

Sobre todo contará con piezas de los fondos de la Biblioteca, pero también del Ayuntamiento de Valencia, de la Diputación y alguna imagen digital ajena para paneles.

La idea, según señala López, es que las actividades «se vayan distribuyendo a lo largo del año». De ahí que, al menos, hasta octubre haya iniciativas previstas. En febrero está programada la presentación de un sello de Correos conmemorativo dedicado al escritor; la Falla Manuel Candela también dedicará su llibret al autor, mientras que en abril está pendiente una remodelación de la exposición permanente de la Casa-Museo del escritor.

De cara al verano, en el mes de junio, habrá en la hemeroteca municipal una muestra sobre la obra periodística de Blasco Ibáñez, mientras que en julio se reunirán en Valencia profesores de Literatura de Secundaria de toda España, para analizar la figura del padre de Flor de mayo. En ese mismo mes se proyectarán al aire libre películas basadas en sus obras.

Pasado el periodo estival, en octubre, tendrá lugar en Valencia el encuentro de la Asociación Nacional de Casas-Museo y Fundaciones de Escritores (que agrupa unas 50 entidades) y que contará además con participantes de otros países como Portugal, Italia, Grecia, Francia o Argentina.

Asimismo, López avanzó que también se está trabajando en la publicación de un libro de cuentos inéditos de Blasco Ibáñez, una edición en gran formato de Flor de mayo con las ilustraciones que Blasco le encargó al pintor José Segrelles, así como en la organización de viajes desde Valencia a Menton, para conocer la villa Fontana Rosa, la última residencia del escritor.

«Sumar» esfuerzos

López alabó el interés de las instituciones para «sumar» esfuerzos en el año —no oficial— de Blasco. Este periódico ha podido saber que desde Presidencia de la Generalitat Valenciana también hay interés en celebrarlo, aunque consideran que aún «es muy pronto» para concretar iniciativas, pese a que queda poco más de un mes para que se cumplan los 150 años del nacimiento del autor de Arroz y tartana.