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Festejos taurinos

Luis Algarra, una divisa aclamada en Valencia

Numerosas peñas se desplazan hasta la finca La Capitana, en Sevilla, para escoger los toros que exhibirán en las calles

Luis Algarra, una divisa aclamada en Valencia

Parece que fue ayer, pero ya hace diez años que nos dejó Luis Algarra Polera, ganadero caracterizado por la humildad, respeto, personalidad, constancia y profesionalidad. La Comunitat Valenciana ha disfrutado de numerosos toros de este hierro sevillano por sus calles, donde los aficionados han sabido valorar y reconocer un hierro de encaste propio. De hecho, hace unos días la Associació en Defensa de les Tradicions de Bous a Carrer le concedió el premio al toro «Mejor Presentado» por su astado exhibido en las fiestas de Sant Vicent Ferrer de Vall d´Uixó.

Y es que el secreto está en la buena selección. Luis Algarra Polera, allá por los años 80, con un riguroso y selectivo cruce de vacas y sementales ha obtenido toros de lidia con una morfología extraordinaria que supone un reclamo para las fiestas de los pueblos del Mediterráneo. Las características de sus toros es un animal astifino, bajo de agujas, con movilidad y transmisión. Muy apetitoso también para las figuras del toreo. De hecho, José Tomás reapareció en 2007 en Andalucía con uno de sus toros y en València, Román cortó dos orejas a «Fusilero» en la pasada Feria de Julio. Y es que Luis Algarra, soldado de profesión, supo comprar al viejo Juan Pedro, abuelo del actual Juan Pedro Domecq, lo mejor y en poco tiempo llegó a superar incluso el nivel de la casa madre.

Sin embargo, uno de los herederos, su hijo Luis Algarra Crehuet, no está conforme con la actual línea que se está llevando. En declaraciones exclusivas a Levante-EMV, nos cuenta que desde que falleció su padre en 2006 la ganadería ha sufrido un cambio alejado de lo que buscaba el patriarca, como consecuencia de la desavenencia familiar. Nos afirma que «la actual gestión ha hecho temblar los cimientos de la ganadería, se han ido perdiendo los principios y valores por los cual luchó mi padre». Nos indica que hasta que su hermana Aurora, copropietaria de la ganadería, no lleve a cabo la participación, él no podrá volver a los orígenes y buscar el toro que soñó su padre, ese toro que «creó, crió, pudo conseguir y pudo disfrutar», que es un toro armónico, largo de lomo, noble, de gran profundidad, serio de expresión y que humilla en cada embestida.

Objetivo que espera conseguir cuando, por fin, pueda llevarse a cabo el proceso de partición en el que está inmerso. Y es que en la actualidad él encuentra una falta de «profundidad, duración y regularidad» en sus toros. Nos explica que su hermana Aurora «es una gran aficionada y está llevando bien la ganadería, pero por otros caminos diferentes al que yo quiero centrarme. Soy muy exigente».

Luis Algarra es una divisa muy aclamada en la Comunitat Valenciana. Cada temporada numerosas peñas se desplazan hasta la finca La Capitana, en el término de Almadén de la Plata (Sevilla), donde los toros se erigen como reyes de un ecosistema singular, en una dehesa espectacular de encinas y alcornoques, tan necesaria para el ecosistema, donde convive el toro bravo y el cerdo ibérico, para adquirir alguno de sus toros, ya no sólo por la bravura y por la garantía de éxito, sino por el trapío, presencia y la bonita lámina de pelajes variopintos negro, burraco, flor de gamón e incluso castaño y colorado. Además, en la ganadería se llevan a cabo actividades para turistas y aficionados para que puedan compartir con los ganaderos la pasión con la que se vive el mundo del toro en el campo. Así, Luis Algarra Crehuet señala que «es una obligación nuestra -la de los ganaderos- acercar la dehesa al público para que conozcan de primera mano cómo viven los toros, cómo se les cuida y se les mima hasta que se lidian en la calle o en la plaza». Para Algarra los «bous al carrer» en la Comunitat Valenciana -explica- «son muy importantes para todas las ganaderías de lidia; el mérito de las peñas es enorme. Hoy en día los ganaderos de lidia ya no sólo vivimos de las corridas, sino también los toros exhibidos en los festejos populares».

El reciente premio otorgado por la Asociación en Defensa de los Bous al Carrer le supone «una satisfacción muy importante, un honor que también te premien en los festejos populares, no sólo en las plazas de toros». Y es que Luis Algarra se ha ganado un hueco en nuestra tierra. Numerosos pueblos de la C. Valenciana han disfrutado de la bravura de sus astados como Puçol, Faura o Sagunt en 2015 y La Vilavella, Foios o Almassora, otros años. Luis Algarra Crehuet ve el futuro con esperanza y espera en el 2017 conducir en solitario su hierro, pues el legado que dejó su padre, la trayectoria, le avala.

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