Los protagonistas de 2001: Odisea en el espacio se habrían sentido como en casa si hubieran aterrizado en el desfile que Miquel Suay ofreció ayer en la pasarela 080 Barcelona Fashion, que por un momento se trasladó al espacio de la mano de la nueva colección del diseñador valenciano.

Los acabados en oro, plata y cobre, el color negro y los tejidos impermeables fueron algunos de los protagonistas del desfile, que contó con la presencia del codiciado modelo francés Clement Chabernaud.

Suay, ganador del Premio Nacional de la Generalitat de Cataluña a la mejor colección primavera-verano 2017 durante la anterior edición de la 080, regresó a la pasarela con una colección arriesgada que presentó con una performance impecable, con música y escenografía ad hoc, y con la implicación del público, al que hizo cubrir con unas túnicas doradas.

El diseñador valenciano explicó que se ha inspirado en la carrera espacial de finales del siglo XX „de hecho en el desfile se pudieron escuchar fragmentos de discursos reales„ y en filmes como la mencionada película de Stanley Kubrick y otros títulos más recientes como Interestellar o Gravity para idear esta colección.

«Me suelo inspirar en conceptos que quieren romper los propios límites del ser humano», subrayó el creador, que precisó que su objetivo es reivindicar la centralidad del ser humano y la humanidad en todos estos procesos.

A la hora de llevar esta idea a la ropa, Suay apostó por las prendas oversize, que recuerden a los trajes de los astronautas pero complementadas con detalles que permitan adaptar las prendas a la figura humana y las hagan más cómodas.

Parte de la innovación que ha aplicado consiste en combinar prendas clásicas, como la lana y el cachemir con otras más vanguardistas como el neopreno.

El resultado final son prendas que recuerdan al imaginario de las naves especiales y que buscan a un «público que tiene mucha personalidad, que quiere comunicar su personalidad mediante la ropa, salir de la manada y sentirse bien y guapo consigo mismo».