El denominado Museo del Mañana (Museu do Amanhã) de Río de Janeiro, diseñado por el arquitecto valenciano Santiago Calatrava, ha sido galardonado con el premio MIPIM al edificio sostenible más innovador que otorga la feria internacional con el mismo nombre, considerada como la más importante mundo dentro del mercado inmobiliario. El jurado del premio -que se otorga anualmente en Cannes- ha destacado que el centro es un edificio singular dedicado a la «búsqueda de un futuro diferente».

Entre las innovaciones del edificio se incluyen paneles solares que siguen el movimiento del sol para maximizar la absorción de energía; un sistema para la recogida del agua de lluvia, y otro para la canalización del agua obtenida de las profundidades de la Bahía de Guanabara, para su uso en el aire acondicionado del museo. Tras ser utilizada en las láminas de agua a los costados del edificio, se devuelve filtrada y limpia a la Bahía en una pequeña cascada.

El resultado de estas innovaciones es el ahorro de 9,6 millones de litros de agua y 2.400MWh de electricidad, la energía necesaria para abastecer a 1.200 hogares, según datos del propio Museo del Mañana.

Este proyecto también le sirvió al valenciano para ganar el «Best New Museum», galardón concedido por el Leading Culture Destination Awards en 2016. El edificio del museo se inauguró en diciembre de 2015 para ser el «catalizador» del progreso de Puerto Maravilla, una zona conocida por su degradación urbanística. La construcción está inspirada en la vegetación del entorno y en la cultura brasileña.

Se trata de un proyecto conjunto de la Ciudad de Río de Janeiro y la Fundación Roberto Marinho, y cuenta con el apoyo del Gobierno brasileño, a través de la Secretaría de Estado de Medio Ambiente, y del Gobierno Federal.

Algunos de los edificios con los que el arquitecto ha ganado más premios es el Innovation, Science and Technology Building en Florida (Estados Unidos) o el World Trade Center Transportation Hub de Nueva York, el centro de transportes -que conecta líneas de metro- situado en la «Zona cero», donde ocurrieron los atentados yihadistas del 11-S. Este último proyecto fue inaugurado en 2016 y su construcción se completó en siete años, con un coste de 3.629 millones de euros.

Megaproyecto en Londres

El pasado mes de febrero, Calatrava presentó su proyecto «Península Place», su primer trabajo en suelo británico, y el que considera que será «la síntesis de su carrera». La iniciativa se enmarca dentro del plan de transformación de la Península de Greenwich, el proyecto de regeneración urbana más grande de Europa, con un presupuesto de 9.838 millones de euros. El proyecto del valenciano ocupará una superficie de 130.000 metros cuadrados, con torres de oficinas, apartamentos, cines, hoteles y un puente que cruza el Támesis.

El propio arquitecto, de 65 años, presentó el plan en una rueda de prensa junto al alcalde de la capital británica, el laborista Sadiq Khan, que destacó: «Este nuevo hito para Londres y el crecimiento de esta zona de la ciudad creará un nuevo distrito para londinenses y visitantes de todo el mundo».