Verónica es una adolescente que vive en el barrio madrileño de Vallecas. Un día realiza una sesión de «ouija» con sus amigas y a partir de entonces, nada es lo mismo. Paco Plaza hace un guiño a los elementos de su infancia en València. Verónica, dice, es su alter ego y la Avenida de la Plata, su Vallecas valenciano. Ayer , el director de la saga «REC», volvió a su ciudad para presentar su nueva película de terror, una pieza que tiene «mucho de él mismo».
¿Por qué engancha el miedo?
El cine de terror te brinda un espacio seguro para pasar miedo de manera controlada. Puedes sufrir sin que eso signifique pagar un peaje en tu vida. Disfrutas asustándote y después sales del cine y tu vida sigue, sin repercusiones.
Parece que las historias basadas en hechos reales dan más miedo, ¿por qué?
El hecho referente a la historia real contribuye a que la sensación de temor se agudice. Te traslada a lugares reconocibles. Por ejemplo, Verónica está ambientada en Vallecas, pero toda ciudad tiene barrios de paisajes parecidos, de entorno familiar, de edificios en bloque...todos esos elementos potencian que el espectador se sienta identificado.
¿Cuál es la Vallecas de València?
Para mí, el escenario donde podría haber ocurrido «Verónica» en València es la Avenida de la Plata, como ya he apuntado, tiene elementos de barrio integrado en la ciudad.
Dice que la película tiene algo de autobiográfico, ¿también ha tenido alguna experiencia como la de Verónica en la vida real?
No, afortunadamente no he vivido nada parecido (ríe). Pero la película tiene parte autobiográfica porque estoy aportando mucho de mí mismo. Yo, como Verónica, también iba a un colegio religioso, me gustaban Héroes del Silencio, pasaba mucho tiempo con mis hermanos...tenía esa especie de fantasía privada de la que disfrutan los niños y de la que los adultos están excluidos. Verónica es lo más parecido a mi alter ego. Me siento identificado con ella.
¿Qué mensaje reflexivo lanza con «Verónica»? ¿Tiene trasfondo psicológico?
Sí. Verónica habla del tránsito traumático de la niñez a la adolescencia. Tú cambias, tu cuerpo cambias...ya casi no te reconoces. Verónica ve que, además de sus cambios personales, cambia la manera en la que el mundo se relaciona con ella. Crecer es como una especie de expulsión del paraíso perfecto.
Hablando de cambios...el miedo es uno de los sentimientos que más determinan las acciones humanas, ¿nos cambia?
Somos prisioneros del miedo, todo lo malo que hacemos nace de un sentimiento de miedo y a su vez, el miedo nace del desconocimiento y lo ajeno a lo que controlamos, a lo que nos es familiar. Lo desconocido nos aterroriza.
Y a usted, ¿le dan miedo las películas de miedo?
A mí, los programas de TV y telediarios me dan más miedo que ninguna ficción. La explosión de realidad me aterroriza. Leer los periódicos y ver la realidad en la que vivimos me da más miedo, por eso cada vez lo hago menos.
¿Qué tiene el terror que no tengan otros géneros?
Cada género tiene lo suyo, el género de terror no es mejor ni peor. Yo creo que en las películas de terror, de la misma forma que en las comedias, hay un pacto con el espectador, pero en este caso el pacto ofrece emociones fuertes y eso es algo a lo que es difícil sustraerse.
En un momento en el que hay tantos recursos audiovisuales, ¿son necesarios los efectos especiales para asustar a una sociedad acostumbrada a lo espectacular?
No, yo creo que no. El terror viene de la emoción. Viene de comprender, de empatizar con los personajes. La sociedad tiene los mismos miedos desde Atapuerca yo creo. Miedo al dolor, miedo a la muerte, al sufrimiento de los tuyos...así que no, no creo que sean necesarios.
La pérdida de visibilidad del espectador angustia. ¿Asusta más la oscuridad?
El sonido es una herramienta fundamental en el cine de terror. Es por aquello de que da más miedo lo que no ves que lo que ves. Porque aquello que no ves es más sugerente, inquieta. Es un recurso que utilizamos bastante, sí. El espectador no es consciente de todo lo que está pasando y es una sensación que agobia.
¿Viene mucho a València?
Vengo mucho menos de lo que me gustaría.
¿Qué significó preestrenar su nueva película el miércoles en su ciudad natal?
Significó poder ver la película con toda mi familia, mis padres, mis hermanos, mis amigos de la facultad....fue un reencuentro con una parte muy importante de mi vida. Y más en esta película que habla un poco también de mis recuerdos, de mis vivencias de niño.
