Lo que más creamos los valencianos es literatura. Así lo indican las estadísticas de registros de propiedad intelectual de la Comunitat Valenciana de los últimos años. Desde 2007 y hasta 2015, se registran, de media, unas 3.500 obras al año en la autonomía y de esa cantidad, el 70 % constituyen creaciones literarias. A este mayoritario porcentaje le siguen las composiciones musicales con un 15,44 % y obras artísticas con el 5,67 %, según los últimos datos de los que se disponen referentes al año 2015.
El cine ha crecido en los últimos años. En 2007, 18 piezas audiovisuales se registraban en la Comunitat y ocho años después, casi el doble de películas salían a la luz.
La creatividad expresiva, ya sea mediante la escritura, la música o la pintura, forma parte de una tradición artística que sigue estando muy presente en nuestros días.
Sin embargo, con los años y el avance de las tecnologías se está dando paso a otro tipo de ideas caracterizadas por su innovación digital. En este sentido, los registros territoriales de la propiedad intelectual están recibiendo, también, creaciones que pertenecen al ámbito de la informática como páginas multimedia, programas de ordenador y bases de datos.
Los nuevos hábitos de consumo, ligados, en muchas ocasiones a la actividad on-line, también marcan registros con la introducción de nuevas variantes en los formatos como el libro ilustrado o electrónico. Por provincias, València es la que más solicitudes de registro presenta con un 61,59 %, seguida de Alicante con 28,35 % y Castelló con 8,51 %. Las solicitudes telemáticas son el 1,55 %.
La Propiedad Intelectual es competencia exclusiva del Estado pero su ejecución corresponde a la Generalitat, que, mediante el Registro Territorial, se encarga de proteger los derechos que generan los contenidos de autores o empresas cesionarios de derechos intelectuales.
Según los últimos datos a los que Levante-EMV ha podido tener acceso, es decir, los que corresponden al año 2015, en España se registraron 25.317 piezas de contenido de propiedad intelectual.
De esa cantidad, las comunidades que cuentan con más inscripciones son Madrid, con un 30,7 %, Catalunya, con un 16,4 % y la Comunitat Valenciana, que aglutina casi el 10% de los contenidos que se añaden al registro.
A pesar de que a priori parezca que el dato nacional constituye una cantidad elevada, lo cierto es que en los últimos cuatro años, las creaciones registradas han experimentado un descenso notable, tanto en ámbito nacional como en ámbito territorial. Desde 2011 hasta 2015, ha habido 10.000 registros menos en España, y en la Comunitat, se ha bajado un 25,4 % desde 2007 hasta 2015.
Según tesis expuestas por la Organización Mundial de la Protección Intelectual, los años de crisis provocan un descenso acusado de las obras registradas. Pero... ¿A qué se debe? La institución sostiene que a falta de una bonanza económica existe también, una falta de fuentes de inversión e innovación para poder costear el reconocimiento de la propiedad intelectual de una obra.
Los valencianos lo que más registran son obras literarias y científicas. Pero no es algo característico del territorio levantino, en el resto de la geografía nacional, también es el ámbito creativo que más protegen los autores. Los datos nacionales, muy similares a los territoriales, lo ilustran bien: Un 72,5 % de las obras registradas en España son literarias y científicas seguidas por las composiciones musicales, que se resumen en una cantidad de 15,9 %.
