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A sangre y fuego

Cayetano recibe el alta hoy y Garrido podrá torear dentro de 15 días

A sangre y fuego

Si la fiesta estuviera basada en el sufrimiento de un animal, no habría nada más que hablar y el asunto hubiese sido prohibido por las autoridades competentes hace mucho tiempo. Pero el toro es el único ejemplar de su especie que puede librar la muerte sórdida de un matadero y defenderse hasta el punto de comprometer el destino de un hombre que, libre y conscientemente, se entrega a la tarea de reducir su fiereza hasta someterla.

La cornada es el alto precio que debe pagar el torero por dedicarse a su arte, por grande o ínfimo que este sea. Es la piedra de escándalo de una parte de la sociedad que considera la muerte o su posibilidad como un fracaso, que se afana en esconderla, que no entiende que un hombre provisto de un trapo rojo se enfrente a un animal para robarle al tiempo unos instantes de eternidad, poniendo su vida en juego o, incluso, entregándola a cambio.

Muchos han sido los diestros que durante esta temporada han regado con su sangre los ruedos de la piel de toro. Especialmente trágica ha sido la muerte de Iván Fadiño en Francia, como lo fue la de Víctor Barrio hace más de un año en Teruel. El de Orduña ha escrito otra de las páginas trágicas del arte de Cúchares que, paradójicamente, continúan engrandeciéndolo. El final del año taurino deja también un grupo de diestros convalecientes de diversos percances.

Cayetano, que resultó herido duramente el pasado miércoles por un astado de Parladé, ha sido el último en caer. El diestro de origen rondeño se mostró decidido ante un toro con ritmo, movilidad y fijeza. Por el izquierdo, el animal le volteó feamente tras suspenderlo durante unos segundos eternos entre los pitones y le infirió una cornada en el muslo, con un orificio de entrada de 6 centímetros y tres trayectorias generándole una profusa hemorragia. A pesar de la gravedad del percance, Cayetano tuvo la entereza y la raza de permanecer en el ruedo hasta dar muerte al astado de una estocada que le valió el premio de dos orejas que no pudo recoger al ser trasladado rápidamente a la enfermería. Ese día debió tomar la alternativa Jesús Enrique Colombo, líder de los novilleros con 37 festejos, pero una cornada de 25 centímetros que le rompió el aductor derecho el día de la Comunitat Valenciana -48 horas antes del doctorado- en el coso de la calle Xàtiva se lo impidió. Tal y como adelantó el joven en una entrevista a Levante-EMV, se convertirá en matador de toros en la próxima feria del Señor de los Milagros de Lima. Sebastián Castella será el padrino del venezolano con Ginés Marín como testigo el domingo 26 de noviembre. Según ha podido saber este periódico, Colombo cumplirá toda su temporada americana como matador de toros ya que aseguró que su etapa novilleril finalizó en València. El joven venezolano ya tiene más de diez corridas de toros firmadas.

En la plaza limeña también reaparecerá José María Manzanares desde que aquel 3 de agosto fuera operado de urgencia de una lesión cervical que le impidió acabar la temporada española. El alicantino volverá a los ruedos el domingo 3 de diciembre con toros de García Jiménez junto a Andrés Roca Rey y Rafael Serna.

Precisamente, este último resultó herido en la axila derecha con pronóstico grave el día de su alternativa en La Maestranza, un hecho que le impidió continuar la lidia. Rafael Serna también volverá a vestirse de luces en la capital peruana.

Un día antes del percance de Cayetano, José Garrido también resultó herido en el coso de Pignatelli por un sobrero de Lagunajanda en una tarde en que el pacense tiró de raza y amor propio tras una tremenda voltereta y terminó cortando dos orejas, un apéndice a cada uno de su lote. Los fuertes golpes sufridos en el percance le han producido fuertes dolores que han obligado al torero a someterse a una resonancia magnética donde descartaron mayores lesiones. José Garrido ya ha sido dado de alta pero tendrá que desplazarse con muletas o silla de ruedas hasta pasados los 15 días del percance.

Adrián Henche resultó feamente volteado el pasado domingo en el festejo mixto celebrado en Las Ventas y no pudo continuar su lidia. El novillero formado en la Escuela Taurina de Colmenar Viejo, que dio una vuelta al ruedo en su presentación en el coso venteño este verano, se ha sometido a diversos estudios radiológicos donde se ha apreciado una fractura vertebro-discal de L1. En ese mismo estudio, se observa que posee una rotura de ligamentos que no afecta a la médula por milímetros, algo que hubiera reducido la movilidad del joven espada. Será tratado con corsé termoplástico durante una larga rehabilitación.

Ferrera, repuesto

Antonio Ferrera ya se encuentra prácticamente recuperado después de probarse en un tentadero de ocho vacas en la ganadería de Parladé, propiedad de Juan Pedro Domecq, junt0 al diestro francés Juan Leal. El coletudo extremeño, con una cornada en el muslo izquierdo de diez centímetros recibida en la plaza de toros de Albacete, no pudo cumplir su doble compromiso en la Feria de Otoño y rechazó el ofrecimiento de la empresa Pagés para sustituir a José María Manzanares en el ciclo sevillano de San Miguel, un gesto que engrandece su figura y alimenta su plenitud de cara a la próxima temporada.

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