Sus dibujos saltaron primero de su cuaderno a la pantalla del ordenador, y ahora volverán a hacerlo para adosarse sobre camisetas, pantalones y...pijamas. La ilustradora valenciana Sara Peña es la nueva artista que ha fichado la marca Oysho para decorar sus prendas y accesorios. La joven emprende su nueva etapa profesional en el mundo de la moda hoy mismo, con su traslado a Barcelona, la ciudad donde la empresa -perteneciente a Inditex- ha ubicado su departamento de creatividad, donde Peña trabajará los próximos seis meses.
"Nunca pensé que pudiera hacer algo así. Cuando empecé a dibujar lo hacía como un hobby, ni siquiera pensaba de qué podrían servir mis dibujos, si para la animación, la ropa o para colgarlos en la pared", explica. Su alter ego es 'Sara Paint'. Así la conocen en redes sociales como Facebook o Instagram donde cuenta con miles de seguidores. Muchos de ellos, ingleses o franceses. "Es algo abrumador", reconoce la joven.
En 2014 inició un proyecto en las redes denominado 'A year of art'. En él, la valenciana se comprometía a hacer un dibujo al día y subirlo a las redes. "Lo hice con la intención de salir de un bloqueo emocional. El típico que se te queda cuando acabas una etapa y no sabes cómo empezar la siguiente". La joven acababa de finalizar sus estudios de Bellas Artes en la Universitat Politècnica de València (UPV). "No sabía qué hacer. En la facultad aprendemos los conocimientos sobre nuestro oficio, pero cuando salimos a la calle no sabemos cómo aplicarlos".
La naturalidad de los trazos y el optimismo que proyectaban sus ilustraciones le hicieron ganarse un sitio en las redes. "Mi intención era dar buenas vibraciones a través de escenas cotidianas donde también tuviera cabida el humor". La gran protagonista de los dibujos de 'A year of art' la propia ilustradora. Se autorretrata en escenas cómicas y comunes en las que pueden reflejarse la mayoría de internautas. Recién levantada, agobiada por una entrega, nadando en el mar... "No sé por qué pero siempre tiendo a autorretratarme. Tal vez es por la falta de imaginación en algunos momentos. ¡Fueron 365 días de dibujos!", destaca la valenciana.
Se inspira en la naturaleza, en escenas familiares y en su propio mundo interior, ya que muchas de las escenas que retrata evocan el recogimiento, el hogar y el bienestar personal.
Un libro ilustrado
El proyecto acabó siendo un libro, A year of art, en diciembre de 2015. Dos meses después de acabar su compromiso diario con las redes.
"Internet es tremendamente útil para la gente que está empezando. De hecho, todos mis trabajos profesionales llegaron a raíz de estar en redes", reconoce.
Desde 2015, Peña ha trabajado para algunas editoriales y para una cadena de cafeterías. Ella era la encargada de dibujar, como la famosa protagonista de Amélie (2001), los platos del día en cientos de establecimientos de Madrid, Castelló y València.
Acaba de terminar el Máster en Diseño e Ilustración de la UPV. "Estoy en un momento en el que tengo que pensar en qué dirección quiero que vaya mi trabajo. Antes dibujaba con una actitud inocente, sin esperar nada, ahora me pregunto más cosas", explica.
