La exdirectora del Instituto Valenciano de Arte Moderno (IVAM) Consuelo Císcar se ha acogido a su derecho a no declarar en su comparecencia hoy como investigada por las supuestas irregularidades al frente de la gestión de este museo alegando que todavía se mantiene secreto parte del sumario.

Císcar ha acudido a la Ciudad de la Justicia de Valencia acompañada de su abogado y no ha realizado ningún comentario ni a su llegada ni a la salida.

La de hoy era la primera citación para declarar como investigada ante la jueza de Instrucción 21, ya que su anterior comparecencia, el pasado mes de marzo, fue en una vista de medidas cautelares, en la que se decretó para ella y su hijo, también investigado, libertad condicional, la retirada del pasaporte y la prohibición de abandonar el espacio Schengen por riesgo de fuga.

Esta causa está abierta por los delitos de malversación de caudales públicos, prevaricación administrativa y falsedad documental contra diez investigados, entre ellos la exdirectora del IVAM, su hijo -y del exconseller condenado por corrupción Rafael Blasco- y subdirectores y técnicos de diferentes áreas del centro artístico.

El caso IVAM, que se inició en julio de 2015 tras una denuncia de la Fiscalía, investiga los supuestos sobrecostes en la adquisición de obras de arte y en la contratación de publicaciones, además del posible uso de los medios del museo para la promoción artística del hijo de Consuelo Císcar.

El pasado mes de octubre la Audiencia Provincial de Valencia confirmó el embargo de 12 obras de arte (entre las cuales figuran siete piezas de Carmen Calvo y cinco de Ramón de Soto, Francisco Caparrós, Alberto Corazón, Bernardí Roig y Equipo Crónica) a Císcar por no haber aportado los títulos de compra.

La instructora de la causa entiende que "existen indicios de que las mismas han sido adquiridas por la señora Císcar a resultas de la actividad delictiva que se investiga en la presente causa".

La jueza sospecha también de que la exdirectora del museo forzaba la exposición de las piezas en las muestras organizadas por el IVAM para que se revalorizaran; y mantiene que utilizaba a sus hijas y a su nieta para ocultar que ella era la verdadera titular de las mismas.

Desde el pasado mes de marzo, la exdirectora del IVAM tiene retirado el pasaporte y, por tanto, no puede abandonar el espacio Schengen.