Se ha dicho que son la generación que «no quiere relaciones», la que está «hiperconectada» y la que concibe el amor como algo «transitorio». Sin embargo, sigue siendo cierto -incluso para esta generación- aquello de lo del «primer amor no se olvida». Así lo ha demostrado Lluch García, periodista y escritora valenciana, cuyo debut literario ha causado revuelo en el sector editorial. Su libro Aunque hoy sea lunes (NPQ Ediciones) narra el desamor juvenil con una sinceridad y espontaneidad que suelen verse en Internet, pero no en papel.

El libro, que mezcla prosa y poesía con ilustraciones de Álex Arnau, narra los sentimientos de una joven adolescente que acaba de pasar por una ruptura muy dolorosa. Una historia corriente que tiene el rostro de millones de jóvenes. Solo que en este caso, el relato solo pertenece a su autora. Lluch García-vecina de Alzira- escribió Aunque hoy sea lunes durante dos años, el tiempo que le costó recomponerse de su primera ruptura y crecer como adulta. «Al principio escribía casi por diversión, aunque no sólo quería contar mi historia sino la de todas las jóvenes que viven eso alguna vez», explica la autora, de 23 años, que por aquel entonces contaba con un blog donde volcaba sus pensamientos y trabajos semiprofesionales como periodista. Una editorial vio aquellos textos y se interesó por Lluch.

La obra se compone de textos cortos acompañados de ilustraciones evocadoras y en ocasiones, autobiográficas. En los textos, la autora se sincera, describe sus miserias, sus aprendizajes y aconseja a las nuevas generaciones. «Si de algo puede servir el libro es para orientar a aquellos que están pasando por lo mismo. Durante la adolescencia, los fracasos y las inseguridades hacen mella en ti. Aprender es doloroso. Todavía creemos en el amor romántico, y eso nos ciega. En estos dos años aprendí que no hay que aceptar ciertas cosas en la pareja», explica. Según García, las mujeres siempre han sentido «dudas» e «inseguridades» que les atormentan Ahora, «por fin», son capaces de contarlo. «No estoy descubriendo América. Esto siempre ha estado ahí, solo que no siempre ha sido posible narrarlo de esta manera».García hizo de la escritura una terapia para superar un mal trago. Lo que no previó es que la literatura acabaría siendo el vehículo que la conduciría a la autorealización y a la madurez emocional.

De Internet al papel

Como ya le ha ocurrido a miles de artistas y jóvenes escritores, Lluch García fue «descubierta» en las redes. Sin embargo, el significado del éxito todavía pasa por el formato en papel. «Para mí es un privilegio que mis textos puedan estar impresos. Todo lo que se toca, permanece. Está a otro nivel», asegura.

Actualmente, la autora sigue escribiendo. «Ojalá haya un Aunque hoy sea martes, pero todo se verá». «¿Su consejo es después de la tormenta llega la calma?». «No. Las heridas que deja el amor solo se curan con más amor. Asumámoslo».