El año comienza a golpe de danza en el Teatre principal de València. Toda una declaración de intenciones por parte del director adjunto de Artes Escénicas del Institut Valencià de Cultura (IVC), Roberto García. Se trata de un primer ciclo íntegramente dedicado a la danza y que reunirá a tres reconocidas compañías valencianas sobre las tablas del teatro de la calle de Las Barcas: Maduixa, Titoyaya y Taiat Dansa.
Hasta el 21 de enero, la compañía Maduixa estrenará la versión para sala de «Mulïer», un espectáculo con dos premios Max y el premio al mejor espectáculo de calle de la Fira de Tàrrega. Se trata de la versión para sala de esta propuesta de danza sobre zancos interpretada por cinco bailarinas. Un espectáculo que investiga los límites entre la danza, el equilibrio, el movimiento y la poesía, la fuerza y las emociones. «Un homenaje a todas las mujeres que durante siglos de opresión han luchado por la igualdad y por mantener viva su naturaleza instintiva», dijo ayer Joan Santacreu, director de la obra durante su presentación en el Principal.
El siguiente espectáculo del que podrán disfrutar los amantes de la danza contemporánea es «Lluita». Este espectáculo de la compañía Titoyaya, coproducido con el IVC, se representará del 26 al 28 de enero. y con ella la compañía celebra sus 10 años de trabajo. En «Lluita», tres coreógrafos, Daniel Abreu, Gustavo Ramírez Sansano y Eduardo Zúñiga, se unen para ofrecer su versión del concepto de lucha y producir tres piezas cortas que comparten un único espacio escénico como si se tratase de escenas de un mismo espectáculo. El público se situará también en el escenario del Principal en torno a una plataforma redonda. Un máximo de 120 espectadores podrán asistir a cada función, señalaron la productora Verónica García y el propio Zúñiga.
El tercer espectáculo de este ciclo será «Man Ray», una coproducción del IVC y el Ballet de la Generalitat con el Mercat de les Flors y la compañía Taiat Dansa, que estará en cartel del 2 al 4 de febrero. Esta obra se centra en la figura de Man Ray, que se multiplica de forma obsesiva para reflejar la relación fetichista del fotógrafo con sus musas, explicaron ayer las coreógrafas.
Según coincidieron ayer García, los responsables de los tres espectáculos y el director del IVC, Abel Guarinos, tanto «Mulïer» como «man Ray» reivindican la figura de la mujer mientras que «Lluita» hace alegato de la lucha del individuo consigo mismo y con el entorno.
