P Han vuelto las colas al IVAM después de muchos años. ¿Por Miró?
R Fundamentalmente por Miró. Las colas también vuelven por un trabajo continuado de consolidación del museo, por su conjunto de exposiciones y actividades didácticas. Pero Miró es un referente fundamental del arte de este país. Cuando el IVAM plantea esta muestra, el público responde.
P A punto de cumplir 30 años, ¿el IVAM ha vuelto a conectar con el público como en sus inicios?
R Estamos cada vez muy contentos con esta identificación. Hay un trabajo más consistente en nuestro deseo de mostrar artistas significativos del arte del siglo XX, que la gente pueda disfrutar, y por eso hay un mayor entente entre el público y el museo.
P Pero había ganas de ver la obra de uno de los mejores pintores del siglo XX.
R La tarea de un museo es complicada. Hay que presentar a los artistas más conocidos para que el público los vea en su propia ciudad, pero al mismo tiempo tiene que apostar por nuevos caminos que ahora no son conocidos, pero pueden serlo dentro de 20 años. No hay que olvidar que Miró no vendió nada en su primera exposición y que fue muy contestada. Cosas que nos aparecen muy atrevidas, dentro de unos años pueden ser figuras fundamentales del arte. El IVAM tiene que jugar esa función. Por un lado, presentar a esos artistas básicos para entender la creación artística del siglo XX y XXI; y al mismo tiempo las nuevas maneras del hecho creativo.
P ¿Por qué el IVAM no había realizado ninguna exposición monográfica de Miró?
R No lo entiendo. Habrá gente que le gustará más y a otra menos, pero Miró es fundamental para entender el arte, no solo español, sino europeo y mundial. Es indiscutible. Hemos llenado ese vacío para ofrecer algo significativo.
P ¿Ha sido complicada montar la exposición?
R Reunir 200 obras de un artista tan emblemático como Miró es muy complicado.
P Supongo.
R Por diferentes razones. Una, porque hemos traído obra de más de quince instituciones públicas y numerosos coleccionistas privados, y eso requiere de un proceso muy largo. La exposición tiene dos grandes virtudes. El conjunto se entiende como una mirada más contemporánea a Miró. Y esa globalidad introduce en su conjunto obras fantásticas, individualidades que son fundamentales en la tarea creativa de Miró.
P ¿Cómo por ejemplo?
R Desde la primera de 1917, «Siurana, el camí», del Reina Sofía, una obra magnífica que habla de ese primer Miró, en lo que podríamos denominar el orden, donde empieza a pintar vinculado a las vanguardias más fovistas o postfovistas de principios del XX. Hasta 1981, dos años antes de morir. Una persona, de la que estamos celebrando el 125 aniversario de su nacimiento, con obras profundamente contemporáneas. Puede verse el conjunto de la obra de Miró o seis, siete, diez obras de primerísimo orden y que por primera vez se han reunido en València.
P ¿Qué manifiesta el público cuando contempla la exposición?
R Hemos organizado un taller específico de Miró porque todas nuestras actividades didácticas están completas. Existe una demanda de visitas guiadas y los sábados por la tarde y los domingos por la mañana el IVAM es gratuito. La reacción es muy positiva, sobre todo los fines de semana con colas que no recordábamos desde Sorolla, hace 29 años en los inicios del museo.
P ¿El renacimiento del IVAM?
R La seriedad y el trabajo diario son cuestiones muy importantes en un museo. Eso nos permite prestar y pedir prestadas obras, y que su vinculación con el mundo del arte no responde a ideas etéreas. Eso el IVAM lo ha tenido en diferentes épocas de su historia, y creo que lo vuelve a recuperar ahora. Me atrevería a decir que es el segundo museo más importante de arte moderno y contemporáneo de este país.
P ¿En qué se basa?
R Por las obras que nos piden y por las facilidades que tenemos cuando pedimos obras.
P ¿Está en su mejor etapa como director?
R La dirección de un museo es una trabajo continuado y a largo plazo. Para un museo de las características del IVAM hace falta diez años para que esto se note. Una exposición como la de Miró te puede llevar más de dos años organizarla. Eso un exposición, imaginemos la colección del museo, darle coherencia, no comprar por comprar-
P La exitosa exposición de Miró es sólo una parte de la oferta actual del IVAM.
R Un museo no está hecho solo de grandes exposiciones. Insisto que es un trabajo constante y de todo un equipo. Es Miró pero también Ródchenko que inauguramos dentro de nada, o artistas que hace trabajo específicos para museos.
P Siempre ha dicho que el número de visitantes es secundario en un museo.
R No es fundamental, es más que la gente entienda la exposición de Miró. Si encima tenemos la fortuna que la gente viene, estamos radiantes. No debemos tener prisa, porque es un trabajo constante. Las prisas son malas en el arte y la cultura. Hoy es Miró pero el año que viene serán otras exposiciones magníficas.
P ¿Cuáles?
R Ya las veremos.
P Por lo que dice, supongo que también serán referentes del arte del siglo XX, como Miró.
R Estamos trabajando en ello. El IVAM es uno de los pocos museos en España, junto con el Reina Sofía, que su colección empieza a inicios del siglo XX hasta hoy mismo, o hasta mañana. El arte moderno es difícil y costoso pero estamos empeñados. Miró es el primer paso, no va a ser el último ni mucho menos. Estamos trabajando para que al año que viene podamos mostrar exposiciones del mismo calibre que Miró.
P El año que viene el IVAM cumple 30 años. Además de esa exposición que no quiere desvelarme, ¿habrá algo especial?
R Trabajamos en la consolidación del centro Julio González, gente fundamental para entender el arte del siglo XX y gente que está emergiendo. También llevaremos nuestra colección a diferentes lugares. Todo para consolidar un museo como se proyectó.
P Un museo que necesita una ampliación.
R Sí. Hay varias cuestiones que lo evidencian. Tenemos una de las mejores colecciones de Europa de vanguardias históricas, de los años 20 y 30. También del arte informalista español, nuestros Millares, Saura, Tàpies son excelentes. Tenemos, y no quiero ser petulante, la mejor colección de arte pop de España. Hay miles de obras en nuestros almacenes. El año pasado prestamos mil obras, pero hay otras miles que no podemos mostrar. Debemos prestar atención a nuestra biblioteca, con más de 50.000 volúmenes, el archivo de Julio González, de Josep Renau, de Eusebio Sempere, de Manolo Gil. Nuestra biblioteca puede ser una de las mejores de arte de la primera mitad del siglo XX de España. Todo esto necesita un espacio para mostrarlo. Pero tenemos esa doble alma del arte más contemporáneo, del siglo XXI. El IVAM del siglo XX necesita expandirse.
P ¿Hacia donde?
R Es un arte con nuevos materiales, nuevas maneras de relacionarse con el público. La creación no se para, constantemente busca nuevas formas. El IVAM necesita un espacio donde poder dar rienda suelta a todo este tipo de esfuerzos.
P ¿El MuVIM es ese espacio adecuado?
R Mi labor como director es plantear las necesidades conceptuales y artísticas que tenemos. A la Conselleria y al conseller [Marzà] le corresponde decidir el dónde, cómo y cuándo.
P ¿Qué le ha dicho la conselleria?
R Ha sido muy bien recibido . La conselleria lo ve necesario, pero no es a mi a quien corresponde decir dónde, cómo y cuándo.
P ¿Pero tendrá alguna opinión sobre cuál es el espacio adecuado?
R Hay diferentes sitios que pueden ser posibles.
P ¿Es probable para el año que viene, para la celebración del treinta aniversario del IVAM?
R Sería fundamental, un acto simbólico. Que nuestro treinta aniversario fuera coronado, no solo con grandes exposiciones, sino con la ampliación del IVAM, sería excepcional.
P ¿Qué le diría a alguien que todavía no ha estado en el IVAM?
R El IVAM es un lugar de descubrimientos y disfrute, por tanto le diría que no tenga miedo. La cultura, el arte y el conocimiento no está vinculado a algo aburrido, pesado, soso. Y aquí le vamos a dar todas las necesidades para que disfrute. Ni el museo, ni Miró son mausoleos.
