El portavoz de cultura del Grupo Popular en Les Corts, Miguel Ángel Mulet, anunció ayer que el PP presentará una proposición en Les Corts para que la Conselleria de Cultura «alcance un acuerdo con los trabajadores del Coro de la Generalitat que evite su desmantelamiento».
Mulet se reunió con representantes del comité de empresa del Coro de la Generalitat, José Viures y Fernando Piñango, por la «grave situación laboral que atraviesan los trabajadores del coro», a causa de la situación de temporalidad que vive gran parte de la plantilla de la agrupación liderada por Francesc Perales.
De hecho, el coro envió una misiva al Institut Valencià de Cultura (IVC) el pasado mes de marzo en la que pedía a la administración «la consolidación definitiva de la actual plantilla». En diciembre se llegó a un acuerdo entre los sindicatos y la administración para la reducción de la temporalidad en el sector público instrumental de la Generalitat, sin embargo, el coro continúa sufriendo esta circunstancia, pese a haber superado pruebas de acceso «que cumplían los requisitos de igualdad, mérito, capacidad y publicidad», respondieron los integrantes del coro en su momento.
En la proposición no de ley, Mulet pedirá una reconsideración del nuevo acuerdo laboral del sector público en lo concerniente a su situación, «un compromiso para mantener el reconocimiento nacional e internacional artístico del Coro» y establecer fórmulas que garanticen el no desmantelamiento «al que parece abocado en un futuro próximo de continuar esta situación».
Mulet explicó que «hay una gran intranquilidad entre los miembros del Coro de la Generalitat tras la firma del acuerdo de la comisión de diálogo social del sector público instrumental de la Generalitat con los sindicatos que les han dejado arrinconados. En el texto del acuerdo hay claras disfunciones con el reglamento del propio Coro, vigente desde 2003», explicó el popular, que denunció el «poco interés» de la Conselleria de Cultura hacia la problemática.
Falta de diálogo
El portavoz popular hizo hincapié en la falta de diálogo de la Conselleria que «ha sido incapaz de sentarse a negociar». «Pese a los intentos por entablar conversaciones, Marzà no ha querido ni siquiera hablar. Los trabajadores han intentado dialogar con los responsables de la Conselleria sin recibir ninguna contestación ni posibilidad de solucionar consensuadamente su problemática», aseguró. El portavoz señaló el «agravio comparativo con el tratamiento que se da a los trabajadores de la orquesta de la Generalitat o de los empleados de otros entes culturales. Hay que encontrar soluciones y sentarse en una mesa donde se propongan medidas factibles y no innegociables», aseguró.
