A. B., Valencia.

La clasificación se comprime y, como los números indican, todo es posible. Con quince puntos en juego, el Valencia puede desde clasificarse directamente para la Liga de Campeones a quedarse fuera de Europa. De ahí que, en esta recta final, cada partido vaya adquirir máxima trascendencia. "Todo van a ser finales", incidía ayer Unai Emery. La primera, la del domingo frente al Espanyol (19 horas). "Será un partido complicado, como todos los de la recta final. Vamos a trabajar a tope para afrontarlo en las mejores condiciones posibles", apunta. Y es que el técnico, teme al equipo de Pochettino. "El Espanyol está realizando un final de temporada sensacional y buscará la victoria para seguir luchando por salir de los puestos complicados", valoraba. A Emery, por cierto, le "encantaría" ver a afición del Valencia en Montjuïc. "Sería muy bonito ver a muchos valencianistas en las gradas. Al equipo le vendría fenomenal el aliento en un partido tan difícil; su ayuda nos será vital, como lo fue, por ejemplo, en Gijón", recordaba el técnico en declaraciones a la página oficial del Valencia.

Emery agradeció "con mayúsculas" a la afición "su apoyo ante el Barcelona" porque "llevó al equipo en volandas" durante todo el encuentro. "Si ellos acabaron orgullosos del equipo, también el equipo está orgulloso de su afición", indicó. El técnico apuntó que la afición "demostró que está con el grupo a tope, y ahora, en este momento crucial de la temporada, han vuelto a desplegar su incondicional apoyo". "Fue impresionante vivir ese ambiente en Mestalla y ver como alentaban a los jugadores en cada acción. Hay que quitarse el sombrero con todos los aficionados por sus ánimos cada segundo", finalizó.