El juez de la sección tercera de la Audiencia Provincial ha decidido "suspender el acto" del juicio que hoy comenzaba por la querella interpuesta por ocho accionistas contra ocho ex consejeros del Valencia CF por una supuesta adquisición fraudulenta de acciones en la primera ampliación de capital del club.

Este proceso dio comienzo con la querella interpuesta en 1996 tras la primera ampliación de capital social que desarrolló la entidad de Mestalla, con Francisco Roig en la presidencia del club.

En el juzgado se han personado como querellados los ex presidentes Francisco Roig y Pedro Cortes, así como el que fuera consejero delegado Manuel Llorente y los ex consejeros Jose López Lluch, Jaime Molina, Vicente Pons y Enrique Puig.

Durante la vista, destinada a presentar por parte de los abogados de ambas partes las cuestiones previas y aspectos procesales no han declarado ninguno de los ex consejeros, ya que tras las estimaciones de los letrados y de la fiscalía, el juez ha decidido "suspender el acto y resolver a parte la cuestión suscitada por las partes".

La ausencia de representante alguno del Valencia CF en el juicio ha sido un factor en el que han incidido las partes, ya que consideran que al ser el club la parte perjudicada, éste debe decidir si se persona o no para esclarecer cuál es exactamente el perjuicio producido.

La acusación considera que están acreditadas las maniobras para acaparar poder por parte de los ex consejeros, así como que algunas acciones fueron adquiridas fuera de plazo, mientras que la defensa estima que si el Valencia no se persona o asegura que no ha sido perjudicado no debería de celebrarse juicio alguno.

Ahora, el juez debe de comunicar si remite los autos al Juzgado de Instrucción para que el Valencia pueda personarse o si continúa el juicio actual.

A la conclusión de la vista, el ex presidente Francisco Roig aseguró que estaba "tranquilo" y que confiaba en la justicia, además de agregar que desconocía si el Valencia tenía previsto personarse en el proceso.

Por su parte, José Calatayud, abogado de la acusación, indicó que considera que aún en el caso de que el Valencia CF no se personase la acusa seguiría adelante.