?Josep Bartual

cheste

Dice Francisco Camps que en la Comunitat Valenciana todo es posible. Lo que ocurrió ayer en Cheste, aunque rozó lo inaudito, sucedió. El President de la Generalitat parece haber encontrado la fórmula para ser permanentemente el centro de la atención informativa. Ayer, con la alcaldesa Rita Barberá como fiel escudera -o mejor dicho, copiloto-, fue capaz de colarse en la fiesta que Ferrari y Fernando Alonso habían preparado en el Circuit Ricardo Tormo, y compartir el protagonismo en una jornada en la que, aparentemente, su presencia era más bien testimonial.

Si lo que ayer sucedió en Cheste es fruto del azar, entonces Camps y Barberá son realmente dos personas muy afortunadas. Compartieron el protagonismo con Fernando Alonso el día en que todo el mundo miraba a Valencia con motivo de la primera aparición pública del piloto asturiano como piloto de Ferrari. La foto lo dice todo: el presidente de la Generalitat al volante de un precioso Ferrari California descapotable color azul claro; la alcaldesa Rita Barberá, con una apropiada blusa roja, de copiloto; y en los asientos de atrás, de pie y saludando a aficionados que se dieron cita ayer en el Circuit, el presidente de la compañía italiana, Luca Cordero de Montezemolo, y los pilotos titulares de la "Scuderia" para el mundial de Fórmula 1 de 2010, el brasileño Felipe Massa y el asturiano Fernando Alonso.

La marca del "cavallino rampante" organizó en Cheste las "Finale Mondiale" de sus campeonatos. Una fiesta anual en la que aprovecha para presentar a sus pilotos de Fórmula 1 y premiar a sus seguidores con todo tipo de exhibiciones. Era la ocasión perfecta para la primera aparición pública de Fernando Alonso con los colores de la marca italiana, pero sus compromisos contractuales con el banco ING, le obligaron a acudir al Circuit de paisano, aunque con un suéter rojo, como guiño a los aficionados.

Después de una calurosa mañana firmando autógrafos sin parar y haciéndose fotos con los aficionados ferraristas, a las dos de la tarde llegó el gran momento: la vuelta al circuito con su compañero de equipo Felipe Massa y con el presidente de Ferrari, Luca di Montezemolo al volante de un California rojo. Pero la primera sorpresa se produjo cuando de repente Francisco Camps y Rita Barberá se subieron a otro California, en esta ocasión de color azul, para acompañarles en la vuelta al trazado.¿Por qué? Seguramente por cortesía de Montezemolo hacia las dos autoridades valencianas.

Ambos coches salieron de boxes y enseguida llegaron a la primera curva, de nombre Aspar. Montezemolo, al volante del California rojo, es un hombre de carreras y que conoce todos los secretos de los circuitos. Debería saber que las escapatorias de las curvas -pucelanas- están llenas de una gruesa capa de grava para frenar a los vehículos en caso de salida de pista. Pero inexplicablemente, el presidente de Ferrari se metió con el coche por allí para ir a saludar a unos aficionados. Evidentemente y como se preveía, se quedó clavado con el coche, mientras Alonso y Massa no daban crédito a lo que pasaba.

A los tres "accidentados" no les quedó más remedio que montarse en el coche que conducía Camps, con Barberá de copiloto, para completar su vuelta de honor. El presidente de la Generalitat, muy prudente al volante, reanudó la marcha con Alonso, Massa y Di Montezemolo en el asiento de atrás. Todo terminó unos 3.000 metros más tarde cuando Camps entró a boxes y sus ocupantes bajaron rápidamente del coche. Mientras la alcaldesa, con una enorme sonrisa, se abrazaba al "piloto" Camps.

Tras el incidente de la salida de pista con el coche pilotado por Luca Cordero di Montezemolo, Fernando Alonso se dirigió por primera vez a los aficionados como piloto de Ferrari y en una breve intervencióm aseguró que el de ayer era "día muy importante para mí, ya que es el primero en el que he podido experimentar el mundo Ferrari, y la verdad es que estoy muy impresionado y muy feliz".

El asturiano añadió que el año 2010 "será muy importante para Ferrari y junto con Felipe -Massa- espero estar en la lucha por el título. Confío en que con nuestro trabajo todos los ferraristas del mundo puedan estar orgullosos de nuestro trabajo y nuestra profesionalidad".

Luca Cordero de Montezemolo, presidente de Ferrari, se mostró "feliz" por la recuperación de Massa tras su accidente en Hungaroring, y dio la bienvenida a Alonso al "mundo Ferrari" en una alocución abierta a la grada del circuito valenciano. "Es un gran campeón y junto a Massa prometemos que el próximo año ganaremos el mundial de Fórmula 1", se atrevió a pronosticar. j. b.cheste