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Lydia Morant Varó ha hecho historia al batir un récord nacional absoluto y hacerlo, además, con una actuación sobresaliente. La marca de 2 minutos, 4 segundos y 30 centésimas en los 200 espalda mejora en más de dos segundos el anterior récord. La diferencia de tiempo sobre sus rivales con la que ganó la final de los 200 espalda también es destacable, ya que la segunda clasificada terminó a 3 segundos de la gandiense nacida en 1990.

¿La del domingo es tu mejor actuación de siempre?

Sí, aunque la equipararía a cuando conseguí la mínima para ir a los Juegos Olímpicos de Pekín. Esta quizá ha sido diferente y más emocionante.

¿Es verdad que decides no nadar los 50 espalda en la jornada del sábado para centrarte en la prueba de los 200?

Así es. El primer día hice los 100 espalda y por la noche lo acusé físicamente. El viernes nadé los 400 libres y estaba algo cansada, por lo que decido reservarme para el domingo en los 200, que es mi prueba preferida.

¿Cómo fue la final de 200?

Creo que fue la carrera perfecta. Por la mañana gané mi serie de clasificación con una marca cercana a mi mejor registro, pero me di cuenta que tenía bastante margen de mejora para la final y así fue. En la final tuvo siempre muy buenas sensaciones y pronto me di cuenta que que iba rápida y estaba marcando diferencias con mis rivales.

¿Qué es lo primero que piensas cuando acaba la prueba?

Mucha alegría y emoción y más cuando me doy cuenta del récord. Tenía muchas ganas de tocar la campanita que simboliza que has batido una plusmarca nacional.

Supongo que llena más ganar y batir el record ante las mejores espaldistas de España...

Sí. La final tuvo bastante nivel con rivales de mucha entidad como Escarlata Bernard o Duane Da Rocha, que también son internacionales. Además, Duane era la poseedora del récord nacional que yo mejoré en dos segundos.

¿A quién dedicas este éxito?

A mis entrenadores, el de antes, Carlos Carnero, con el que hice la mínima para Pekín, y al de ahora Jordi Murio y, por supuesto, a mis padres, por todo su apoyo.

Se puede decir que tu ingreso en la Residencia Blume de Madrid ya está dando sus frutos.

Pues la verdad es que sí. Allí tengo la oportunidad de progresar, de entrenar junto a otras nadadoras de mucho nivel que tienen mis mismos objetivos o incluso más. Lo cierto es que estoy mejorando en espalda y también en crol.

El premio de ganar y el récord es que vas a ir al Europeo de Estambul.

Al principio de la temporada no me iban a convocar y me disgusté un poco. Pero ahora, tras lo del domingo, el director técnico me comunicó que iba a ir. Eso significa que ha rectificado y es de agradecer. Creo que en este campeonato puedo estar en las finales.

Al margen de Estambul, ¿cual será el otro gran objetivo de la temporada?

El Europeo de verano en piscina de 50 metros que se disputará en Hungría. Para ir tengo que hacerme la mínima, pero todavía no se conocen.

De todas formas, tu gran reto a largo plazo siguen siendo las Olimpiadas de Londres 2012É

Efectivamente. Para ello debo aguantar todo el ciclo de preparación y competiciones en la Blume de Madrid y de esta manera tendré opciones de repetir en unos Juegos Olímpicos. Si voy a Londres intentaré que no sea solamente a participar, sino a hacer algo más importante.