?La situación económica del Valencia es muy delicada y Manuel Llorente está dispuesto a tomar "más" decisiones "desagradables". Es decir, que las ventas de Villa y Zigic no serán las únicas, ni la amortización del puesto del director deportivo -eliminación del cargo- la última medida económica que permita recortar gastos y equilibrar el presupuesto. El Valencia, tal como anunció ayer con dureza el presidente, "necesita satisfacer deudas y acreedores". Y para ello, se ajustarán al máximo las cuentas, aunque Llorente no concretó las medidas y se limitó a dejar entrever una rebaja de los sueldos de los directores generales. Otras acciones, no oficializadas, serán las de reducir entre un 25 y 30 por ciento la partida económica destinada a la Ciudad Deportiva y el cambio de sede que permitirá un ahorro mensual de 18.000 euros -en Pintor Monleón se paga un alquiler de 26.000 euros y en la calle Lauria el alquiler es de 8.000-. Medidas que, a largo plazo, podría incluso desembocar en la rebaja de un 20 por ciento la ficha de los jugadores. "El Valencia necesita de atención, de cuidados y de tomar soluciones, que a veces no son populares o son desagradables", valoraba Manuel Llorente tras haber informado al Consejo de Administración de la reestructuración del organigrama y la destitución de Fernando Gómez Colomer como director deportivo; competencias que, a partir de ahora, asumirá Braulio Vázquez, nombrado coordinador de la secretaria técnica. "Hemos amortizado el puesto. Ha sido una decisión objetiva y económica. Siento un gran respeto por Fernando Gómez Colomer. No hay ningún tema personal mío hacia él y seguirá como consejero del club, mientras él quiera", se defendía Llorente. "Se trata -explicó en la repleta sala de prensa de Mestalla -de medidas para dar viabilidad económica al club y que está dentro de la reestructuración global de la sociedad". Y anunció: "Habrá que seguir tomando decisiones porque tenemos que adaptarnos a la economía real de estos momentos", indicó tras desmentir la marcha del vicepresidente Javier Gómez -si se fuera, percibiría como finiquito cerca de un millón de euros, que es lo que estipula su blindaje.

Gómez cobra 430.000 y, si es despedido ingresaría el 75 por cien del sueldo de tres años -. "No se baraja la salida a corto plazo de otro miembro de la ejecutiva", puntualizó en una rueda de prensa en la que, por petición del director de comunicación, sólo se podía abordar aspectos relacionados con el puesto del director deportivo. "Es difícil tomar este tipo de decisiones, pero estoy aquí para ello. A veces nos podemos equivocar, pero lo hacemos pensando que es lo mejor para la sociedad. Tengo por costumbre afrontar los problemas y buscar soluciones y no estar en una terraza tomando café", manifestó Llorente. "El fútbol necesita reconvertirse, y el Valencia también lo necesita de manera particular. No somos ajenos a la economía de este país", apuntó.

Curiosamente, y aunque fue preguntado al respecto hasta en tres ocasiones, Llorente no aclaró si él se bajará el sueldo como medida ejemplarizante: "Estamos ajustando todas las medidas y conforme sucedan se irán anunciando". "No puedo dar la espalda a los problemas. Este consejo decidió asumir su responsabilidad y las decisiones que van encaminadas a resolver los problemas", recordó tras remarcar que las decisiones adoptadas le desgastan "humana y personalmente".

No hay ofertas por Silva y Mata

Llorente desveló que, al día de hoy, "no hay ninguna oferta por Mata, Silva o por otro jugador del club". Y fue más allá: "No se negocia la salida de ningún jugador del Valencia", sentenció. El presidente, en su línea de exigencia, pidió a los futbolistas que "sean competitivos". "No se me pasa por la cabeza pedir a los jugadores nada que no sea la exigencia para el año que viene", aclaró.

Braulio, agradecido

Braulio Vázquez llegó al Valencia de la mano de Gómez Colomer -con quién coincidió en el Castellón- y fue, durante un año, su fiel escudero. Ayer, en su puesta de largo como coordinador de la secretaria técnica, aprovechó para agradecer al ya ex director deportivo su confianza. "Le doy las gracias a Fernando Gómez porque él fue el que me llamó para trabajar en el Valencia y sin él no estaría aquí", recordó. Así, abrumado, reconoció que se trataba de "un momento incómodo" por el hecho de sustituir a la persona que lo avaló y dijo "aceptar de buen grado el puesto como trabajador del club". La descripción de Llorente, con quién congenia perfectamente, fue halagadora: "Es una persona muy capaz, muy preparada y con una gran capacidad de trabajo. Addemás, he visto que pone una gran pasión en su trabajo y en su departamento". Braulio trabajará junto a Javier Garrido y Miguel Ángel Bossio. De momento, y según informó el presidente, Braulio mantendrá su nómina aunque, a partir de ahora, su responsabilidad será mucho mayo.