Wayne Rooney ha quedado definitivamente apeado de la cita de Mestalla por la dolencia en el tobillo que arrastra desde que la pasada temporada se lesionara en Liga de Campeones contra el Bayern de Múnich, y que se le reprodujo la pasada jornada en la visita al Bolton Wanderers. Sin Rooney, la principal amenaza del Manchester United es Dimitar Berbatov. El atacante búlgaro está en uno de los momentos más dulces de su carrera. A sus 29 años, desligado de la selección búlgara por voluntad propia, vuelve a recordar al delantero que despuntara en el Bayer Leverkusen y Tottenham Hotspur, club al que el Manchester United pagó 35 millones de euros por su fichaje.
Ensombrecido en campañas anteriores por Cristiano Ronaldo y las rachas goleadoras de Rooney, Berbatov parecía condenado a un rol secundario de intermitente revulsivo. El bajón de juego de Rooney, rematado por su decepcionante Mundial y los líos de faldas destapados por la prensa sensacionalista británica, le ha abierto una nueva oportunidad, que no ha desaprovechado. Berbatov lleva seis goles en seis partidos, con un triplete estelar contra el Liverpool. A su acierto goleador (va bien de cabeza y con los dos pies) hay que añadir su capacidad para aguantar la pelota, jugar de espaldas a la portería y habilitar espacios a segundos delan?teros y medios con llegada.
La segunda juventud de Scholes
El veterano Paul Scholes, de 35 años, atraviesa un gran momento de forma. Fiero para cortar la pelota en la medular, se suma con facilidad al remate desde el borde del área. Sin Giggs ni Valencia, también lesionados, las alternativas atacantes del United por los extremos se reducen al portugués Nani. El conjunto de Ferguson, segundo en la Premier a tres puntos del líder Chelsea, necesita ganar pa?ra rehacerse del empate en la primera jornada ante el Rangers.
