«Reitero que el plan de negocio para el proyecto no implica nada a pagar por el Comune di Roma. Ni un solo euro se pagarán de las arcas municipales al promotor para el Gran Premio», dijo Flammini en declaraciones que recogía el portal f1aldia.com.

Flammini quiso calmar los ánimos de los ciudadanos romanos tras conocerse que los organizadores del GP de Australia habían admitido unas pérdidas de 50 millones de dólares, las cuales serán sufragadas directamente por el Estado. La planificación del GP de Roma es radicalmente distinta al GP de Europa en Valencia, donde al igual que en Albert Park, el gobierno valenciano se hace cargo del coste de la prueba (19 millones de euros anuales), además de lo que la construcción del circuito urbano, en torno a los 90 millones.