La presidenta del CBM Sagunto e histórica entrenadora de balonmano, Cristina Mayo, afirmó ayer en un encuentro digital con los lectores de Superdeporte que su equipo tuvo "mucho éxito con Gloria Calero, alcaldesa socialista, y parece que eso no nos los perdonan", en referencia a los problemas económicos que atraviesa la entidad que preside y la relación con la corporación municipal de Sagunt, regida por el PP.

La solución a esta cuestión pasa, según Mayo, por "un gobierno responsable que se tome en serio el deporte. Mientras, no hay nada que hacer". Sin embargo, la presidenta del club saguntino admite que, en el caso de RTVV, "el deporte femenino no existe y en todo caso se le da cierta cobertura a los clubes incondicionales del PP, por ejemplo el València, Terra i Mar", y por lo que respecta a las empresas, "el único dinero que dan es a sugerencia de los poderes públicos".

"Los países que se tomen el deporte en serio, como Francia, Alemania, Noruega o Dinamarca, seguirán estando. Nosotros nos lamentaremos cuando hayamos perdido 20 años de trabajo", concretó. Mayo criticó además la falta de planificación de futuro. "Aquí es un sálvese quien pueda, si te va bien, ya nos haremos la foto; si te va mal, pues qué pena".

"Clubes como el nuestro deberían ser declarados de interés público y a través de una buena relación con las administraciones, buscar recursos al mejor precio para los patrocinadores. La relación entre lo público y lo privado es la clave", apuntó la valenciana. "Esto nos permitiría convertirnos en una Fundación y nuestros patrocinadores tendrían muchísimas ventajas fiscales. También creo que la transparencia debe de ser clave. Todo club que recibe dinero público debería ser auditado todas las temporadas, y los gobiernos deberían primar a los que mejor utilicen ese dinero", dijo.