A este Power le falta gasolina. Está "off". Es la conclusión que se extrae tras cuatro derrotas consecutivas en las que el Power Electronics tuvo contra las cuerdas a su rival pero no remató la faena. La última ocasión, ayer, cuando el equipo valenciano perdió en su visita a la Caja Mágica contra un Madrid al que sólo salvó Reyes tras una jugada magistral de Hussein, que puso a su quinteto en zona en el tercer cuarto y apagó las luces a los locales. Pero la reacción, que vino de la mano de un valiente José Simeón, se quedó corta, y en el último periodo el Madrid tiró de fondo de armario y atacó la pintura valenciana, muy mermada sin Javtokas -eliminado- y Lishchuk, con problemas en el tobillo.

Fue el fin, la crónica de una muerte anunciada que se veía venir desde el primer cuarto, por mucho que en el tercero el Power diera muestras de que podía sacar el partido. Qué podría haber pasado con De Colo y Richardson en el parqué, nunca se sabrá, pero lo cierto es que tras la zona y guiados por el descaro de un José Simeón que está creciendo a pasos agigantados, el Power llegó a ir por delante en el marcador. El Madrid no sabía qué había pasado: se había ido al descanso nueve puntos y arriba y de repente estaba dos abajo. Pero al Power se le acabaron las reservas de gasolina y se fue del partido. Para muestra, un botón: cuando quedaba menos de un minuto, el equipo valenciano ni forzó la personal.

Lo peor no es esa imagen de falta de resistencia, sino que, de nuevo, apenas hay tiempo para recuperarse. El miércoles toca viajar a Turquía para enfrentarse al Efes Pilsen, y es probable que las fuerzas sean las mismas que ayer en Madrid. Únicamente Rafa Martínez, con quince puntos, Víctor Claver, con 13, y Savanovic, con 11, maquillaron el resultado, aunque su rendimiento está lejos del esperado, sobre todo en el caso del primer capitán y del ala-pívot serbio. El día que el ex de Cajasol se destape, deslumbrará como en el Mundial, pero por ahora, no está aunque se le espera. Ayer mismo, sufrió mucho contra Reyes y Tomic: Messina leyó a la perfección el partido y supo que atacando el mermado juego interior del Power Electronics podía llevarse el partido. Y ello unido al acierto exterior de hombres como Tucker o Llull, dejó la victoria en Madrid. El Power se hunde en la clasificación y no parece dar muestras de tener las fuerzas necesarias para remontar puestos.

"Había hombres que no estaban para jugar"

El entrenador del Power Electronics Valencia, Manuel Hussein, mostró su resignación ya que considera que tenía jugadores "que no estaban para jugar el partido" por diferentes problemas físicos y que estuvieron flojos de fuerzas en el tramo final del choque. Sobre la remontada de su equipo en el tercer cuarto, Hussein afirmó que la clave estuvo en el cambio de Clay Tucker, lo que ha aprovechado el Power para "ponerse en zona". "En la parte final hemos entrado en un tú a tú y no hemos jugado con serenidad dos balones clave. Al final el equipo no tenía gasolina", aseguró.