Ganar al Bursaspor colocaría al Valencia a las puertas de octavos de la Liga de Campeones. Esta noche hay siete millones de euros en juego, el prestigio de la entidad y una momentánea tranquilidad deportiva. Y es que, el de hoy, es más que un partido, aunque el rival no sea el más atractivo. Ni, a priori, el más competitivo. Pero sí trascendente. Si el Valencia le gana al Bursaspor y el Ranger no puntúa en Manchester, el equipo de Emery conseguirá matemáticamente la clasificación. Todo un éxito. No obstante, si ante los turcos el Valencia sólo es capaz de empatar, certificaría el tercer puesto que da paso a la Liga Europa y seguiría vivo en Europa. A esta plaza, por cierto, es a la única que opta el Bursaspor ya que, último de grupo, todavía no ha puntuado en la competición — y ni siquiera ha anotado un gol cuando ha recibido nueve— y se encuentra en su última oportunidad de cazar la tercera plaza.

«Sólo pensamos en ganar», repitió ayer hasta en seis ocasiones Emery. «El partido es mucho más importante de lo que pueda parecer y no podemos escatimar ni en esfuerzo ni en dedicación», sostenía. Y es que el técnico mira más allá de este encuentro. «Queremos ser primeros de grupo y para eso hay que ganar al Bursaspor y al Manchester», proclamaba tras rechazar firmar acabarla liguilla como segundo de grupo. «Yo no firmo nada. Nadie te da la posibilidad de firmar nada», zanjó.

Emery, extraño en él, calificó a su equipo de «favorito» para ganar, pero quiso puntualizar que eso no significa que «le faltamos el respeto al Bursaspor porque es el vigente campeón y hasta hace poco era líder de su liga», recordó. «En un buen estado, son capaces de ganarnos. Tenemos que preparar el partido esperando lo mejor de ellos», avisó.

Para este encuentro, Emery ha prescindido de Fernandes, Topal y Fehouli, mientras no ha podido contar con los lesionados César, Mathieu, Navarro y Miguel. Stankevicius no está inscrito.

El técnico pide intensidad

Para Emery la clave del partido radicará en la «intensidad» que los jugadores le impriman al encuentro. Y en la actitud. A lo largo de la semana, el técnico ha insistido en ello y ha pedido a los futbolistas que jueguen con la energía que lo hicieron contra el Glasgow Rangers.

Así, todo indica que el técnico recuperará el 4-4-2 que tan buenos resultados le ha dado —ayer justificó que «el estilo de juego del equipo está muy definido y con los sistemas no cambian la idea»— y que volverá a situar como referencia Aduriz y Soldado, quien ya anotó dos de los tantos ante el conjunto escocés. Con Moyà en la portería, todo indica que en defensa alineará a Bruno en la derecha y Jordi Alba —que debutará en Liga de Campeones— en la izquierda con Ricardo Costa y Maduro de centrales; con un centro del campo, en el que Tino Costa —héroe en Bursa— acompañará a Albelda con Joaquín de extremo derecho y Mata izquierdo. Sin embargo, la docilidad del rival, podría servir para que Emery le diera entrada al equipo a Vicente, como interior , y a Isco de media punta. Habrá que esperar. Y seguro que habrá sorpresas. Emery siempre asombra.