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"Cuando vine el Valencia Basket era un club de primer nivel de Europa y ahora no lo es. Me voy de un Valencia que quiere ir por otro camino, que no peleará con equipos grandes por presupuesto, pero yo quiero ir donde se pueda pelear". Con esa frase, lapidaria, se despedía Neven Spahija finalizada la temporada pasada del Valencia Basket Club para fichar por el millonario Fenerbahce. Ironías del destino, la Euroliga ha colocado al Power Electronics Valencia en su camino hacia los títulos. Ni la mente más maquiavélica hubiera planeado semejante situación. La Fonteta, que tanto cariño le dispensó, dará carpetazo este jueves al cruento Top 16. Y sólo uno de los dos, Power o Fenerbahce, seguirá adelante. El guión, cargado de morbo, no necesita alicientes añadidos, pues en juego está un billete para los cuartos de final del torneo continental por excelencia, donde ya aguardan Real Madrid y FC Barcelona, clasificados desde hace semanas.

Neven Spahija (Sibenik, Croacia, 1962) y Svetislav Pesic (Novi Sad, Serbia, 1949), saben de la importancia del próximo choque. Ambiciosos por definición, ambos técnicos son conscientes de que el compromiso del jueves les colocará bajo la lupa. Y cada uno a su manera, y con sus armas, persigue idéntico objetivo: el éxito. A la cita, de envergadura por la calidad de los dos equipos, concurren con los papeles cambiados. El Fenerbahce, que pudo amarrar su pase a cuartos la semana pasada, llega tocado moralmente por la ocasión desperdiciada en su pista, donde cayó de forma inesperada contra el Olimpiakos (65-80). El Power, por contra, acude pletórico pues ha sabido reponerse del varapalo de la Copa del Rey y desde entonces suma sus partidos por victorias - contra Real Madrid, Zalgiris y CAI Zaragoza-. La pérdida por lesión de Víctor Claver, una pieza fundamental en el engranaje del Power, la minimizó en Kaunas un sorprendente Jeremy Richardson, que hacía casi tres meses que no jugaba y reapareció en el cinco inicial rubricando una brillante actuación personal.

La clave, tal vez, resida en cómo canalicen los protagonistas la enorme presión de tan decisivo duelo. Lo cierto es que pese a la diferencia de presupuesto entre el club valenciano y el Fenerbahce -el turco dobla a su oponente-, en Estambul se pudo apreciar que sobre la pista ambos andan a la par. En la segunda jornada de esta segunda fase de la Euroliga el equipo de Spahija sólo fue capaz de vencer por 75-73, con un pabellón entregado - más de 15.000 espectadores en las gradas del Sinan Erdem Arena- . Aquella derrota, que Rafa Martínez estuvo a punto de impedir en dos últimas jugadas que hubieran cambiado el desenlace de no mediar dos tapones de Preldzic, obliga al Power a ganar pasado mañana para igualar los tres triunfos de su rival y a hacerlo por más de dos puntos para superar el "basket average" particular y arrebatarle el segundo puesto del grupo H. Así se mediría al primero del G, el Madrid.

El ambiente de gala en la Fonteta está garantizado. A tres días para el choque apenas quedan unas mil localidades, aunque el club no ha conseguido retrasar la hora del partido, que se mantendrá a las 19,45 horas como estaba fijado de antemano.