La vida personal de algunos futbolistas y técnicos se ha visto seriamente perjudicada, al tener que cambiar de residencia, viviendo en hoteles o residencias propiedad de los directivos de cada club. Incluso hay quien ya se enfrenta a problemas para comprar alimentos. El esfuerzo de los jugadores y empleados, así como la imaginación financiera de algunos dirigentes, ha evitado de momento que la problemática llegue a un colapso total. El mal afecta a casi todas las autonomías españolas por igual. Sólo en el País Vasco, donde la media de los sueldos es más baja y se apuesta más por la cantera, el número de clubes involucrados en impagos es menor.

CD Castellón.

Pol Bueso, Fernando Béjar, Raúl Muñoz y David Rangel, los cuatro capitanes del CD Castellón, anunciaron el pasado domingo que no se presentarán este fin de semana a jugar contra el Mallorca B (finalmente la huelga será contra L'Hospitalet, la siguiente jornada, para que la convocatoria sea dentro de los días hábiles legales) si el club no resuelve la deuda que mantiene con los trabajadores de la entidad, cifrada en 200.000 euros.

Concretamente, se adeudan las mensualidades desde el mes de diciembre y se da el caso que algunos incluso sólo han recibido dos nóminas. Juan Martín Casuco, técnico del conjunto albinegro desde la undécima jornada, sólo ha cobrado una mensualidad desde su llegada y quedan pendientes deudas con jugadores (un total de siete mantienen su denuncia) que ya han abandonado el club pero que militaban en él en la Liga Adelante. La plantilla se reunió ayer con una representación de la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) que ha asesorado en todo momento al equipo en los pasos a seguir. La Federación de Peñas también pasará a la acción con una manifestación que recorrerá este sábado las calles de Castellón.

A 30 junio de 2010, la deuda reconocida por el grupo Castellnou 2005 SL, que domina la entidad con el 87% del accionariado, era de cinco millones de euros. Una cantidad que el grupo Sentimiento Albinegro y el abogado Jesús Jiménez, que negocia la compra de las acciones, temen que haya podido ir a más.

"Desgraciadamente ya no nos queda otra alternativa, este club está abandonado", señala el capitán Pol Bueso. "La situación es insostenible y vamos a ir a la huelga". A este defensa central, de 25 años, la situación le duele personalmente porque el Castellón es el club de su vida, en el que ha pasado por sus categorías inferiores y del que no ha querido irse a pesar de la delicada situación del club: "Yo no he visto jugar al Castellón en Primera, yo lo que quiero es llegar a jugar con el Castellón en Primera -categoría de la que los "orelluts" descendieron en 1991 y en la que militaron en distintas épocas durante once temporadas-".

"Es una lástima que se haya llegado hasta aquí. Un club con la historia y la afición del Castellón no se lo merece", señalaba Bueso. La crisis ha hecho mella en la vida cotidiana de la plantilla ya que algunos futbolistas han cambiado de residencia e incluso se han visto con problemas para comprar alimentos básicos. Todo ello ha acabado afectando al rendimiento del equipo, que se ha descolgado de la lucha por el retorno a la Liga Adelante.

El anuncio de no presentarse al próximo encuentro no ha causado todavía ningún efecto en la cúpula de Castellnou. El Castellón se encuentra en una encrucijada institucional de la que esta semana puede haber novedades. Mañana jueves se celebrará una junta extraordinaria de accionistas en la que el consejo de administración tratará de aprobar una ampliación de capital de 500.000 euros que la oposición considera que no soluciona los problemas de la entidad además de ser un "chantaje emocional" para la afición. Y todo con el tiempo en contra: si no se afrontan las deudas antes del 30 de junio, el Castellón podría descender de categoría administrativamente.

Benidorm CD. El acuerdo, in extremis, para cobrar una mensualidad desbloqueó el anuncio de huelga que la plantilla del Benidorm CD tenía prevista para el pasado 19 de marzo después de las gestiones personales de la directiva encabezada por Adolfo Murillo, que sustituyó a mediados de febrero a la gestora que dirigía el club. Al equipo se le adeudaban las nóminas de cuatro meses (noviembre, diciembre, enero y febrero).

El problema reside en el embargo que Hacienda mantiene a la subvención municipal, buena parte del presupuesto de la entidad. La directiva intenta negociar un aplazamiento de la deuda con Hacienda y la Seguridad Social. Con los 200.000 euros que se mantienen bloqueados, el club de la Marina Baixa podría pagar las cuatro nóminas pendientes ya que el coste mensual de la plantilla se cifra en 50.000 euros. Algunos jugadores se han mudado a habitaciones de hoteles que son propiedad de directivos de la junta de Murillo, a quien la plantilla ha dado un margen de confianza antes de emprender nuevas movilizaciones.

UD Alzira.

Manolo Herrero, técnico del Alzira, recorre en coche seis días a la semana más de 170 kilómetros para ir desde Villena, la localidad en la que reside, a Alzira. Los gastos de gasolina corren de su cuenta porque el club ya adeuda a su plantilla y cuerpo técnico las últimas tres mensualidades y una prometida prima de 10.000 euros por derrotar al Orihuela en enero.

La temporada en el campo Luis Suñer Picó ha estado salpicada de continuos sobresaltos. Las mensualidades de septiembre, octubre y noviembre tardaron en liquidarse. Posteriormente se firmaron pagarés para abonar el mes de enero, que sin embargo no se pudieron validar en el momento del cobro.

El presidente Pepe Bosch cedió el testigo al abogado Javier Soriano, que ya se había interesado por acceder a la presidencia en el verano de 2010. En sus primeras medidas, redujo gastos prescindiendo de cinco de los jugadores con fichas más altas, que rondaban los 3.000 euros. Otros, como Beto o Laurenço, se desvincularon del club. Los jugadores han seguido sin cobrar y se han movilizado en protestas simbólicas, como dejar pasar el primer minuto de su partido contra el Castellón en Castalia sentados en el suelo, o exhibiendo una significativa pancarta antes del choque de este pasado fin de semana contra el Alcoyano: "Necesitamos apoyo económico". Las protestas de la plantilla, que lucha por no descender a Tercera, podrían ir a más en las próximas fechas. La deuda total que arrastra el club de La Ribera se estima en 90.000 euros.

CF Gandia. La plantilla del Gandia, ascendido a Segunda B tras una década errante entre Tercera y Preferente, ya acumula tres meses sin cobrar, pero no hay planteada de momento ninguna movilización ya que la amplia mayoría del equipo mantiene la confianza de que la situación se pueda revertir en las próximas semanas. La comunicación entre la directiva y la plantilla es regular y fluida. El principal problema del club de la Safor es la deuda de un millón de euros de temporadas anteriores.

Alicante CF. El defensa Carlos Castán llegó este verano al Alicante procedente del Neath Athletic, de la Premier League galesa. Castán vive junto a otros 14 compañeros de equipo en una residencia de la villa universitaria de Sant Vicent del Raspeig, propiedad del ex presidente del club Juan Antonio Iniesta. Allí tienen pagados los gastos de manutención (tres comidas al día) y vivienda.

Por ese motivo la plantilla alicantinista todavía no ha decidido rebelarse, pero es consciente de que la situación del club raya el desastre. El equipo no ha cobrado las últimas cinco mensualidades. Sólo en las últimas semanas la directiva pudo ofrecer el 75% de la cantidad de una de las nóminas. Castán valora "la buena voluntad" de los dirigentes, pero no olvida que la actual problemática "se arrastra desde hace temporadas" y que hay jugadores, los que no están alojados en la residencia, "que se enfrentan a graves problemas para hacer frente a hipotecas y gastos diarios. La situación del cuerpo técnico es todavía peor que la nuestra y las condiciones de trabajo en cada entrenamiento son cada vez más precarias".

La plantilla mantiene un contacto fluido con el sindicato AFE, en cuya nueva directiva se encuentran varios ex jugadores del Alicante, como Azkoitia, Luis Gil o su presidente Luis Manuel Rubiales. A pesar de esa delicada tesitura, el rendimiento deportivo del equipo no ha bajado enteros de momento: "Con todo seguimos peleando por meternos en la promoción de ascenso a la Liga Adelante", relata Castán, que contra el Alcoyano, hace una semana, metió un gol desde más de 70 metros de distancia que dio la vuelta a España.

El riesgo de desparición del Alicante es grave. El proceso concursal acaba en junio y el club deberá hacer frente a una deuda aproximada de cinco millones de euros para no ser descendido por la vía administrativa.

El Ontinyent lideró la protesta contra RTVV

La temporada 2010/2011 ha sido también la de la revuelta de los clubes valencianos de Segunda B (a excepción de Alzira y Gandia) contra Canal 9, que adeudaba el contrato del curso 2009-2010. El Ontinyent fue el club que encabezó las protestas, junto a Orihuela, Alicante, Benidorm, Denia, Alcoyano y Castellón, que se plantearon llevar al ente a los tribunales y limitaron el acceso de las cámaras de Canal 9. Después de las primeras movilizaciones la situación cambió y se abrió una negociación entre Canal 9 y los clubes, que en noviembre cobraron el 40% de las cantidades pendientes. Está previsto que el 60% restante se liquide en el presente mes.

Además, todos los clubes han firmado el contrato de esta temporada, con una cantidad fija por partidos más la explotación de la publicidad estática y de los anuncios televisivos en los descansos de los encuentros. Esta partida es fundamental para la economía de los clubes ya que suponen un 15% del total del presupuesto. v. c. t. valencia