La operación de salvamento del Valencia organizada por Bankia cuenta con un grupo de actores secundarios que también obtendrán beneficio. La entidad que preside Rodrigo Rato condonará la deuda con el club a cambio de las parcelas del antiguo estadio en la Avenida de Aragón, del suelo de la ciudad deportiva en Paterna y de parte de los terrenos de Ribarroja. El plan contempla que Bankia financie a la sociedad deportiva con otro préstamo para la construcción del nuevo Mestalla. En este caso, Bankia ha puesto sus condiciones encima de la mesa y ha colado a un viejo conocido de Bancaja como aliado para el desarrollo de las obras: El promotor y constructor José Enrique Granell Guillamón. Su grupo Aedifica se asociará con Bancaja Habitat para llevar adelante los nuevos proyectos vinculados con el Valencia CF. Experto en gestión de suelo, Granell Guillamón comparte muchos intereses con Bancaja Habitat. Uno de sus principales nexos es el Residencial Náquera Golf, la sociedad que en 2002 presentó en el municipio del Camp de Túria un plan de actuación integrada conocido como PAI de Fontanelles que contemplaba la construcción de más de mil chalés de lujo y un campo de golf. El macroproyecto está paralizado porque invadía en parte suelo de protección paisajística de la Sierra Calderona y por el bloqueo en la Consellería de Territorio del nuevo PGOU de Náquera. Para ganarse el favor del ayuntamiento, Granell Guillamón convenió con el municipio construir un edificio de servicios públicos junto al consistorio. Con el PAI paralizado y la irrupción de la crisis, el edificio, conocido como Accis, está sin terminar, con las obras paralizadas. Es una de las vergüenzas del pueblo.
La alianza entre Aedifica y Bancaja Habitat para desatascar los proyectos del Valencia podría abrir una vía de escape para los miles de metros de suelo que comparten en Náquera. De hecho aquí es precisamente donde Bankia aspira a que se construya la nueva ciudad deportiva. A cambio, estos socios se quedan los actuales terrenos de Paterna confiando en una reclasificación o cambio de usos. El negocio es sencillo: Se cambian unos terrenos en Náquera que con la crisis han perdido mucho valor por otros mucho más cerca de Valencia. Detrás de la operación está también, según diversas fuentes, el promotor Agustín Escandon. Expresidente de Viviendas Jardín (ahora Tersicia), Escandon ha compartido negocios y sociedades con Granell Guillamón. De hecho este último fue accionista de Viviendas Jardín, que se vio abocada al concurso de acreedores tras el pinchazo inmobiliario.
